SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Los alumnos y docentes del colegio Tecnológico del Sur avanzan con su proyecto para mejorar la comunicación entre los aislados pobladores patagónicos. Su último trabajo volvió a ser premiado por la Fundación YPF y propone un sistema simple y económico para que los habitantes de Corralito, Cerro Alto y Panquehuau, cercanos al embalse del lago Alicura, puedan comunicarse entre sí mediante internet y también en forma directa, en caso de emergencia.
Los alumnos del colegio ya lograron un premio similar en el 2004, por instalar internet satelital en Corralito. El nuevo proyecto, denominado "Comunicación en Parajes Rurales Patagónicos" fue premiado en la edición 2007 del concurso "Innovación en Ciencia y Tecnología en la Escuela Media" que organiza la Fundación YPF. "Es en alguna medida la continuación de lo que hicimos hace tres años, cuando instalamos el sistema de comunicación satelital en Corralito", explicó Jorge Shitu, coordinador del proyecto. El pequeño paraje rural se ubica a unos 25 kilómetros al sur de la represa Alicura. Este sistema permite desde marzo de 2006 la comunicación telefónica y el acceso a internet a los habitantes del paraje y de la zona de influencia del mismo.
"En este nuevo proyecto, nos propusimos establecer una red de telecomunicaciones inalámbrica que permita el acceso a las comunicaciones en parajes rurales aislados en zonas cercanas a Corralito. Dicha red estará diseñada en arquitectura tipo malla (o red mesh, como se la conoce en la jerga técnica), basada en el sistema satelital instalado en Corralito y otro similar a éste, que se instalará en la Escuela del paraje de Cerro Alto", explicó el docente.
La red estará formada por varios nodos de comunicación interconectados entre sí, instalados en puntos estratégicamente elegidos en la zona de influencia de ambos parajes. Cada uno de estos nodos estará equipado por una antena direccional de alta ganancia, el hardware y el software necesarios para permitir la comunicación entre nodos y con los sistema de comunicación de Corralito y Cerro Alto, que permitan tanto la comunicación telefónica como, eventualmente, el acceso a internet.
El requerimiento energético del equipamiento para cada nodo es mínimo (si no se conectan PC en ellos, menos de 1 W de potencia), por lo que se suministrará la energía por medio de paneles solares con un sistema de acumulación adecuado.
La comunicación entre nodos no tendrá cables y está basada en la tecnología de las comunicaciones inalámbricas o "wireless", usando la frecuencia de 2,4 GHz, de acuerdo a especificaciones IEEE 802.11 (que no necesita permisos ni licencias mientras se mantengan las potencias definidas) y sin costos.
Cada nodo puede funcionar como estación de trabajo (permitiendo que el usuario que tenga acceso al mismo acceda a internet y correo electrónico), o simplemente como ruteador de las comunicaciones de un nodo hacia otro nodo, los sistemas satelitales base, o, a través de estos últimos, con el exterior.
Gustavo Sorrentino, profesor y director técnico del proyecto, explicó que "aún en caso de caída del satélite, los nodos comunicacionales seguirán funcionando como una red telefónica interna, que permitirá la comunicación de los habitantes de la zona entre sí". Agregó que "el tipo de arquitectura comunicacional elegido (en malla o mesh) asegura que, aún en caso de salida del sistema de alguno de los nodos comunicacionales, el resto de los mismos garantizará la comunicación de la zona con el exterior". Las comunicaciones entre nodos se establecerán mediante antenas direccionales ubicadas en cerros que "vean" otras antenas del sistema. Este es un punto de particular interés para la formación de los alumnos que participen en el proyecto, ya que apunta al corazón de la formación específica de un Técnico en Telecomunicaciones.
Los docentes coincidieron que los trabajos motivan mucho a los alumnos y además, permiten mejorar la calidad de vida de muchas personas. "Los chicos aprenden y además ven que con la tecnología se puede auxiliar a muchas personas", explicaron.