Viernes 14 de Diciembre de 2007 Edicion impresa pag. 35 > Sociedad
Ocho nuevas esculturas para un bosque especial
Concluye hoy el encuentro en El Bolsón. Tallaron a 1.400 metros de altura, con nieve y viento.

EL BOLSÓN (AEB) - El Encuentro de Escultores del Bosque Tallado, uno de los pocos en su tipo que reúne características tan especiales, concluirá hoy con los trabajos de sitio ya que la clausura formal se efectuará mañana por la noche en un establecimiento turístico de la localidad. Estos días, en plena actividad, los ocho escultores participantes compartían por igual el goce y las vicisitudes de materializar una obra a 1.400 metros de altura, sobre la ladera Oeste del cerro Piltriquitrón. El frío, el viento fuerte y la nieve no estuvieron ausentes desde el pasado sábado cuando comenzó la cuarta edición del encuentro realizado por primera vez en 1998 y posteriormente en 1999 y 2003.

El domingo, apenas un día después de comenzar el evento, lo que fue lluvia en el pueblo cayó en blancos copos sobre los escultores que apenas habían iniciado su tarea tras la elección del tronco y el emplazamiento que mejor se adecuaba a sus propósitos. Prueba dura para los llegados del norte, como el colombiano Porfirio Pallares, el peruano Miguel Angel Velit o el santiagueño Rodolfo Soria; no tanto para los de la región, como Diego Funes y Carlos Fernández, que viven en El Bolsón, Jorge Calderón (El Hoyo), la única dama, Gaby Kovacevich (Epuyén) o Mariano Chanourdie, quien si bien reside ahora en Azul (Buenos Aires) supo vivir en la muy patagónica ciudad de Esquel. Calderón y Chanourdie ya tienen obras suyas en el peculiar parque escultórico nacido a partir de la idea de Marcelo López de poner en valor un bosque de lengas de altura, dañado por un incendio forestal en 1978.

El Bosque Tallado cuenta con 31 esculturas de sitio y al terminar este encuentro serán en total cuarenta las piezas para conocer. Los ocho artistas comparten su labor en un ámbito inusual y lejos de las comodidades ciudadanas pues pernoctan en bolsas de dormir en un rústico cabañón construido en 2003 por los organizadores del encuentro.

Un grupo electrógeno les provee de la energía para que funcionen algunas herramientas y una videocámara pues el evento se puede seguir por internet gracias al aporte de Coopetel. Abstractas, naturalistas o simbólicas, las obras tienen un significado intrínseco para sus creadores, independientemente de lo que luego inspirarán a quienes visiten el Bosque Tallado. Por ejemplo, Diego Funes, de El Bolsón, esculpe un "ángel de la montaña", en homenaje a su madre, Mabel, fallecida hace poco.

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