NEUQUEN (AN) - El nuevo intendente de Añelo, el kirchnerista Jacinto Hernández, experimentó un sabor agridulce al asumir esta semana el cargo, en reemplazo del emepenista Norberto Izaza. Sus colaboradores le dieron la ingrata noticia de que en la tesorería del municipio sólo había disponible 1,85 pesos.
No fue lo único: también lo pusieron al tanto de que las dos cuentas corrientes que el municipio tiene el BPN estaban bloqueadas. Y cuando las desbloquearon se enteró que en una le quedó un saldo disponible de 64,05 pesos y en la otra 4,29 pesos.
No ha sido el único funcionario que al asumir el cargo se encontró con noticias desagradables en relación a disponibilidades monetarias, deudas y compromisos financieros que tendrá que afrontar.
Fue precisamente el gobernador Jorge Sapag quien se preocupó por dejar bien en claro que Jorge Sobisch le dejó muy poca plata en caja antes de irse. Y como ejemplo destacó, en la asunción, que apenas tenía disponibles $ 10.000.000 en el BPN.
También se quejó el intendente de Plottier Adrián Gallia (PJ), quien sucedió a Pilar Gómez (MPN), denunciando que su antecesora le dejó $ 6.500.000 de deudas, además de numerosos pases a planta permanente de empleados.
Igualmente se quejó el intendente de Mariano Moreno, Juan Carlos Valenzuela (MPN), que sucedió a Ramón Zúñiga.
Valenzuela dijo que el panorama económico-financiero que encontró es más complicado de lo que pensó y de paso denunció que antes de irse Valenzuela se dedicó a librar cheques cuyo destinatarios debería investigar "a fondo".
Pero algo investigó y se encontró que una de las beneficiarias de esos cheques era la esposa del ex intendente, quien recibió alrededor de 4.000 pesos en concepto de "compensación de licencia".
En cuanto a Hernández, en su discurso de asunción dijo que "vamos a trabajar con todos los sectores y fuerzas políticas en pos del bienestar de la comunidad, dejando de lado las diferencias políticas y en coordinación con la provincia y la Nación, para lo cual descontó que recibirá el apoyo del gobierno que encabezara la presidenta Cristina Fernández de Kirchner".
Pero no pudo obviar, naturalmente, el panorama económico-financiero que encontró. "Lamentablemente nos encontramos con una deuda de 400.000 pesos, lo que nos llevará un tiempo poder poner en marcha el plan de gobierno que le propusimos a nuestro pueblo".
