Martes 11 de Diciembre de 2007 Edicion impresa pag. 46 > Deportes
Russo esconde, Boca respeta y JR es el inflador
Ever Banega es el único volante con un lugar asegurado. El plantel, alentado por Riquelme, no subestima al Etoile.

Sebastián Battaglia o Álvaro González, Fabián Vargas o Battaglia, González o Neri Cardozo... Ever Banega es el único volante de Boca que por estas horas fuerme sin frazadas y aunque seguramente Miguel Ángel Russo ya tiene el equipo en la cabeza, no lo da a conocer y eso le abre paso a todas las combinaciones.

Lo único que está claro es que el DT apostará por un 4-4-2 con el indiscutido Banega un poco más adelantado.

El "1" será Mauricio Caranta, mientras que la defensa y el ataque salen de memoria. Hugo Ibarra, Jonatan Maidana, Gabriel Paletta y Claudio Morel

Rodríguez estarán en la línea de fondo y Rodrigo Palacio-Martín Palermo, arriba.

Mientras todos hablan de la final Milan-Boca, una vez más el entrenador salió a decir que "primero tenemos un compromiso importante ante el Etoile. Esto es fútbol y nunca está dicha la ultima palabra, tal como se vio en el partido que ellos ganaron a Pachuca".

El duelo ante los tunecinos será mañana a las 7:30 de Argentina, en el estadio Nacional de Tokio, y se verá por Fox Sports.

A pesar de la gran victoria en la Libertadores, el equipo argentino llega con toda la presión. Luego de un semestre con muchos altibajos, que incluyó la eliminación en los octavos de la Sudamericana y seis caídas en el torneo doméstico, Russo quedó contra las cuerdas y aunque en la dirigencia digan que su continuidad está asegurada, la realidad es que si no gana, las incógnitas crecerán. Y encima, nombres como Carlos Bianchi o Diego Cagna ya meten presión.

La salvación parecía ser JR Riquelme, pero un error en la dirigencia (no lo incluyó en la lista preliminar de 30 ni en la definitiva de 23), más una negativa de la FIFA, dejaron a Boca sin su máxima estrella.

Es cierto que el arribo de JR motivó al platel, pero el volante es clave en la cancha y de hecho, su ausencia motivo a Russo a cambiar el dibujo táctico. Ni siquiera la presencia de Leandro Gracián -un mimado del DT-, alcanza para que el conjunto argentino pueda jugar con enganche.

Enfrente tendrá a un rival al que conoce poco, algo que reconoció entre risas el volante uruguayo González, pero que fue ligeramente desmentido por Russo, quien alcanzó a aclarar que "algo tenemos, algo tenemos" en cuanto a información sobre los tunecinos.

Esta historia semifinal se conocerá mañana y si Boca evita otra sorpresa, después será el tiempo de pensar en Milan, que también tendrá que esquivar una eliminación para después sí, buscar revancha.

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