BUENOS AIRES (DyN).- La presidenta Cristina Fernández comprometió ayer "todos los esfuerzos de la diplomacia argentina" para lograr la liberación de Ingrid Betancourt, secuestrada por la organización guerrillera FARC hace casi seis años.
Cristina Fernández, en su discurso ante la Asamblea Legislativa, pidió que "Dios ilumine" al presidente de Colombia, Álvaro Uribe, para lograr la liberación de esa dirigente que se halla cautiva desde el 23 de febrero del 2002. "Quiero comprometer el esfuerzo de nuestra diplomacia, de nuestro país, y también solicitar a Dios que ilumine al señor presidente de la hermana y querida República de Colombia, para poder alumbrar una solución, que exige el derecho humanitario internacional, sin que esto signifique inmiscuirnos de ningún modo en los asuntos internos de otro país", señaló.
De esta manera, y ante la presencia del presidente Uribe y de la madre de Betancourt, que reclama la liberación de su hija, la presidenta pidió a su colega colombiano que "pongamos todo el esfuerzo, toda la voluntad posible para no llegar demasiado tarde a una solución".
Yolanda Pulecio, madre de Betancourt, rogó ayer "la ayuda" de los jefes de Estado latinoamericanos "para presionar" a la guerrilla y al presidente Álvaro Uribe con el fin de liberar a su hija. La mujer se reunirá hoy con la manda
taria electa, Cristina Fernández, de quien elogió, al igual que de su esposo, Néstor Kirchner, "una humanidad, un deseo de ayudar muy grande" para que Betancourt salga de su cautiverio en la selva colombiana,
donde permanece desde el 23 de febrero del 2002.
"Tienen corazón, tienen alma, no como el presidente de Colombia, que es un presidente totalmente desalmado. Durante seis años le he rogado y explicado que permita un diálogo, y cada vez que se acerca lo daña, como lo dañó ahora faltándole el respeto al presidente (venezolano Hugo) Chávez", quien medió con la guerrilla, fustigó.
El reclamo por la liberación de Ingrid Betancourt cuenta con el respaldo del gobierno de Francia, cuyo presidente, Nicolás Sarkozy, se había interesado por el tema ante su par de Colombia, a lo que se sumó la presencia en Buenos Aires del primer ministro de ese país, Francois Fillon, que también llevó a cabo iniciativas en ese sentido.
En tanto, tratativas y negociaciones en favor de la liberación de Betancourt se registraron al coincidir la presencia de los presidentes de Colombia, Venezuela y Brasil, que llegaron para los actos de asunción.