BUENOS AIRES (DyN) - El jefe de Gabinete, Alberto Fernández, salió hoy a criticar duramente las medidas de fuerza anunciadas por los tamberos en rechazo al precio de referencia de la leche dispuesto por el Gobierno, y exhortó al sector a modificar el modo de reclamar "porque este método de debate de apretarnos innecesariamente -advirtió- no tiene mucho sentido".

"Si ellos entienden que tienen que regalar la leche el 10 de diciembre y entienden que tienen que venir con las vacas (a Plaza de Mayo), pues que lo ganan, pero todo esto tiene poco sentido", se enojó Fernández, en relación a algunas medidas de protesta adelantadas por los productores, en coincidencia con el día de asunción de Cristina Kirchner a la Presidencia.

En declaraciones a radio FM La Isla, el funcionario sostuvo que las medidas de fuerza anunciadas "nos obliga a nosotros a tenerlas en cuenta para que no se generen problemas en el mercado". Convencido de que "no es posible que tengamos este nivel de virulencia porque solamente estamos discutiendo dos centavos por litro de leche", Fernández señaló que, en verdad, "lo que tenemos que hacer es seguir discutiendo, seguir hablando, seguir buscando una solución porque lo estamos discutiendo es un problema de crecimiento, no de descenso". "A mí me parece central que cambiemos el método de debate porque este método de debate de apretarnos innecesariamente no tiene mucho sentido", advirtió el jefe de ministros.

Anoche, en una asamblea realizada en la Sociedad Rural de la ciudad cordobesa de San Francisco, productores lecheros de esa provincia, de Santa Fe, de Entre Ríos y de Buenos Aires decidieron bloquear en forma sorpresiva las industrias lácteas.

La decisión de fijar el litro de leche a un precio de referencia de 78 centavos, anunciada por el futuro ministro de Economía, Martín Lousteau, provocó la indignación de los representantes de la actividad tambera.

Esta mañana, Alberto Fernández manifestó su malestar por las medidas de fuerza resueltas por el sector: "Con el campo siempre tenemos este tipo de problemas. Esto es por dos centavos de diferencia y hay que preguntarse por qué se extrema de este modo la discusión", se quejó.