Buenos Aires.- El saldo de la reservas internacionales en poder del Banco Central de la República Argentina (BCRA) alcanzó hoy la cifra récord de 45.002 millones de dólares, según informó el organismo monetario.
De acuerdo con los datos provistos por el Banco Central, el stock de reservas se incrementó en 165 millones de dólares respecto del viernes, aunque los números definitivos se conocerán recién el miércoles próximo.
El crecmiento en el monto de reservas respondió a una intensa participación del Central en la plaza cambiaria, con compra de dólares por entre 80 y 100 millones, mientras que el resto se explica por ingreso de divisas proveniente de organismos internacionales, explicó a la agencia de noticias Télam una alta fuente de la entidad.
Entre los organismos, cuyos ingresos de dólares incrementaron las arcas del Central, se cuenta el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la Asociación Latinoamericana de Integración (ALADI) -por concepto de compensaciones- y el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BRIF).
En lo que va del año, el volumen de reservas registró un aumento de 12.965 millones de dólares respecto a la marca acumulada al 31 de diciembre pasado.
"Los resultados exitosos de la aplicación de esta estrategia quedaron en evidencia durante el reciente contexto internacional desfavorable", destacó la entidad a través de un comunicado.
Según explica, contar con un amplio stock de liquidez permitió amortiguar los eventuales impactos de la turbulencia financiera en la economía real, a través de operaciones de venta de divisas en el peor momento de la crisis.
"Los 45.000 millones de dólares son suficientes para desalentar movimientos especulativos, además de brindar estabilidad y previsibilidad", resalta el organismo monetario.
La absorción del exceso de liquidez del mercado es también un factor que contribuyó a la estabilidad de los agregados monetarios, y así lo destaca en más de una oportunidad el propio titular del BCRA, Martín Redrado.
En el transcurso de los últimos años, el Central esterilizó alrededor de 78.000 millones de pesos asociados a las compras de divisas que realizó.
Con este fin, el Central promovió el desarrollo del mercado de pases, la profundización del mercado de Lebac y Nobac y proveyó de mecanismos para el cobro anticipado de redescuentos que había otorgado en el período de crisis 2001-2002.
Durante el último año, el régimen de flotación administrada impulsada por el Central se concentró en evitar ofrecer un "seguro de cambio", que favorezca el ingreso de capitales especulativos, y que la volatilidad de corto plazo distorsione las decisiones de consumo, ahorro e inversión.
Así, desde el inicio de esta crisis internacional, la paridad nominal peso por dólar varió en un rango de 2,5 por ciento.
En comparación, en igual lapso el real brasileño osciló en un rango de 10 por ciento; el peso colombiano, un 13 por ciento; el rublo ruso, un 2 por ciento; el baht tailandés, un 12 por ciento, y el won coreano, un 6 por ceinto.
"Lo evidente es que el comportamiento reciente del mercado cambiario argentino es normal bajo un prisma internacional", insiste el Central.
Tras lo cual considera que "de haber estado bajo un esquema de libre flotación, el tipo de cambio habría llegado a niveles mucho más altos, con riesgos de volver a la dinámica devaluación-inflación recurrente en la historia económica de Argentina".
Fuente: Télam.