BOGOTÁ (DPA/AFP).- Las pruebas de vida de 16 rehenes de las FARC, decomisadas por las autoridades a tres insurgentes capturados en la capital colombiana, motivaron ayer al gobierno de Colombia a buscar alternativas con ayuda del gobierno francés para buscar el canje de rehenes por rebeldes presos.
Las cartas, fotografías y videos de los rehenes, entre los que se encuentran imágenes de la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt y tres estadounidenses, fueron decomisadas por el Ejército a milicianos de la red urbana de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en Bogotá. Aunque en un principio el Ejecutivo habló de testimonios de 17 secuestrados, luego aclaró que son 16.
Una de las imágenes más impactante es la de la de Betancourt, secuestrada en febrero del 2002, que aparece en un video de menos de un minuto de duración que más parece una foto por su inamovilidad. La otrora fogosa y combativa senadora apenas parpadea algunas veces y resume en sus facciones el dolor por el secuestro en un país que, después de cuatro décadas de conflicto armado interno, no ha podido dejar atrás la violencia.
El presidente de Colombia, Álvaro Uribe, anunció tras conocer las evidencias de vida de los rehenes que explorará con el gobierno de Francia y la comunidad internacional nuevas fórmulas para lograr la libertad de los secuestrados. "Buscaremos mecanismos para la libertad de los secuestrados, que sean efectivos y que no implique protagonismo político del terrorismo", dijo Uribe. El jefe de Estado afirmó que las pruebas reveladas advierten una tortura "semejante a la que se observó en los campos de concentración del nazismo".
"Deploro especialmente el caso de la doctora Ingrid Betancourt y del ex senador Luis Eladio Pérez. Las FARC es un terrorismo torturador de lo peor de la historia de la humanidad, pero dentro del esquema hablado vamos a seguir trabajando por la liberación de los secuestrados", sostuvo. Uribe reiteró su llamado a las FARC para que libere de manera unilateral a los rehenes y los entregue, si así lo requieren, al presidente de Venezuela, Hugo Chávez, quien hasta hace una semana trabajó como mediador de un canje de rehenes por rebeldes presos. "El gobierno de Colombia no se opone a eso, lo ve como una gestión humanitaria", precisó.
Respecto del hallazgo de las pruebas, el comisionado gubernamental para la paz, Luis Carlos Restrepo, afirmó que los cinco videos, siete cartas y la memoria electrónica confiscados están fechados el 1º de enero de 2007 y el 23 y 24 de octubre pasados.
El acuerdo humanitario con las FARC plantea un canje de entre 47 y 50 rehenes, entre ellos Betancourt, tres estadounidenses y políticos, militares y policías por unos 500 guerrilleros, incluidos 2 extraditados a EE. UU.
