Ayer, Diego Simeone decidió terminar con los rumores que lo ubican muy cerca de River y habló. El entrenador de Estudiantes fue muy claro: su continuidad en el "pincha" dependerá de que que permanezcan en el plantel Juan Sebastián Verón y Sebastián Domínguez y de que lleguen cuatro refuerzos para encarar la temporada 2008, que incluye la Copa Libertadores.
Pero Simeone fue más allá. Dejó en claro que estas condiciones no tienen nada que ver con la posibilidad de dirigir a River, ya que ningún dirigente "millonario" se comunicó con él para ofrecerle el cargo. Tras la negativa de Ramón Díaz, el "Cholo" es el preferido de los dirigentes de River.
Al meterle presión a los dirigentes de Estudiantes, Simeone indicó que ellos "saben cómo tienen que manejar los números", pero recordó que en el último año "se han ido (Mariano) Pavone, (Fernando) Ortiz, (Marcos) Gelabert, (Marcelo) Carrusca y (José) Sosa y entiendo que estamos en condiciones de hacer un esfuerzo para ver un equipo mejor".
Simeone dio ayer una conferencia de prensa y luego protagonizó un raid mediático por radios y canales de televisión en el que remarcó que "más que el dinero", lo que le importa en esta etapa de su carrera "es ganar".
Si bien Simeone eludió brindar precisiones sobre las incorporaciones de jerarquía que solicitó, entre esos nombres se encuentran los de Diego Placente, Juan Krupoviesa, Fernando Cavenaghi, Ernesto Farías, Sebastián Abreu, Gonzalo Bergessio, César Carignano y Mauro Cetto. Mientras tanto, River espera y se ilusiona con un portazo del "Cholo".