LA PAZ (AP)Seis de los nueve departamentos de Bolivia cumplían un paro el miércoles contra el gobierno del presidente Evo Morales, al que sus dirigentes acusan de violar las leyes y los derechos humanos en el supuesto afán de concentrar poder y prorrogarse.
Morales, ante cientos de seguidores, afirmó que ``el paro es contra la Renta Dignidad (un bono para los ancianos), contra la nacionalización de los hidrocarburos, contra otros cambios y para defender el modelo neoliberal que tanto daño ha hecho''.
En Chochabamba, seguidores del gobierno se enfrentaron a opositores y en Santa Cruz grupos de protesta chocaron con comerciantes que mantenían abiertos algunos mercados. Las protestas se caldearon con la aprobación por parte del oficialismo y cuatro legisladores suplentes, a medianoche del martes, de una ley en el Congreso que quita recursos a las prefecturas (gobernaciones) departamentales para pagar una renta a los ancianos.
Morales promulgó la norma el miércoles. Los prefectos (gobernadores) y dirigentes cívicos de las regiones que convocaron al paro, coincidieron en que la protesta es ``contundente'', aunque el gobierno rechazó esas evaluaciones.
La oposición sostiene que un cerco de cientos de seguidores de Morales les impidió ingresar el martes al Congreso para participar en la reunión, supuestamente por instrucciones del propio gobierno. El bloque opositor había aprobado en el Senado otra ley que, en vez de restar recursos a las prefecturas para la renta, los tomaba del gobierno.
Morales había encabezado el lunes la llegada de una marcha de ocho días de campesinos cocaleros y de otros sectores, afines al Movimiento al Socialismo, MAS, en el gobierno, en demanda de la aprobación de una norma que quitara los recursos a las prefecturas, no del gobierno, y en apoyo al proyecto de constitución aprobado por el oficialismo el sábado, en un liceo militar en las afueras de Sucre.
El presidente del Comité Cívico de Santa Cruz, Branko Marinkovic, señaló que la Constitución aprobada, que debe pasar por varias instancias más, está ``manchada de sangre'' y anunció que las regiones opositoras no la acatarán.
Tres civiles murieron en Sucre en enfrentamientos con la policía el pasado fin de semana cuando el oficialismo aprobaba la constitución en ausencia de la oposición. El proyecto contempla la reelección presidencial indefinida, la creación de 36 autonomías indígenas con gobierno y territorio propios --que a juicio de los prefectos opositores apuntan a liquidar sus pedidos de autonomías departamentales--, la anulación del Senado y un mayor control de los medios de comunicación por parte del estado.
El ex presidente y jefe del principal partido opositor Podemos, Jorge Quiroga dijo en rueda de prensa que ``la democracia está al borde al abismo por un régimen tiránico'' y pidió a la comunidad internacional el envío de observadores. ``Al gobierno se la cayó el disfraz, aquí ya no hay estado plurinacional, aquí se trata de seguir el ejemplo de Chávez para perpetuarse en el poder'', declaró, en alusión al presidente venezolano Hugo Chávez.
