NEUQUÉN (AN).- Tras casi un año de obras, hoy al mediodía se inaugurarán las renovadas dependencias del aeropuerto de Neuquén, que incluyen una moderna sala de espera, preembarque, escalera mecánica y ascensor. Las remodelaciones demandaron a Aeropuertos del Neuquén una inversión superior a los 8.000.000 de pesos.

La inauguración se realizará hoy a las 12:30 y contará con la presencia del presidente de la concesionaria dependiente de Aeropuertos 2000, Eduardo Gutiérrez, y del gobernador neuquino, Jorge Sobisch.

El aeropuerto internacional Juan Domingo Perón sumó con estas obras una renovada imagen, en la que se integran los sectores del complejo, anexándose un servicio de calefacción y aire acondicionado central. El cambio más importante se dio en el interior del edificio con la remodelación del hall central, las dependencias de 'check in' y la sala de embarque donde se anexaron sillas para el confort de los pasajeros.

Una marquesina renovada

En el exterior se integró la imagen del viejo edificio, se cambió la marquesina que protege a los pasajeros que llegan al complejo y se colocaron nuevos carros portaequipajes.

También se dispuso una garita de cobro del estacionamiento donde entran 200 vehículos.

Entre las reformas realizadas se incluyó además la creación de nuevos locales comerciales tanto en la planta baja, como en la planta alta. Se modernizó la confitería, a la cual se puede acceder por escalera mecánica o por ascensor. En este último caso la incorporación se dio por un reclamo canalizado por un grupo de usuarios de la aeroestaciones que padecen discapacidades motrices.

Las obras estuvieron a cargo de la empresa Riva SA, cuyos responsables recibieron duras críticas por parte de los usuarios que en pleno invierno debieron soportar la falta de calefacción y algunos accidentes durante la construcción.

La remodelación abarcó además el sistema cerrado de televisión del edificio y el cambio de las instalaciones eléctricas, que sumaron una subestación transformadora de una potencia de 1.000 kilovatios.

La inauguración se da a un mes de que la aeroestación neuquina dejara de recibir el 50% de los vuelos diarios de la empresa Aerolíneas Argentinas.

Este cambio generó una oleada de cuestionamientos a raíz de la incidencia que la aeronavegación tiene en el turismo de toda la región.