ROCA (AR).- Los continuos robos y saqueos de cables que vienen jaqueando la red eléctrica que mantiene la empresa Edersa, siguen a la orden del día. Sólo durante este fin de semana en hechos ocurridos en Allen y Cipolletti fueron sustraídos alrededor de 1.700 metros de este material.

Desde la firma informaron nuevamente sobre el accionar de los ladrones de cables a la Policía, aunque advirtieron que a partir de ahora también se gestionará "ante las autoridades provinciales competentes, el reclamo por el daño económico derivado de estos robos".

Tal como se informó en anteriores oportunidades, la firma lleva contabilizado el robo de más de 300.000 metros de cables en los últimos años, cuya pérdida estimó en más de 1 millón de dólares.

Los últimos hurtos tuvieron lugar en Allen y Cipolletti. Durante la noche del viernes pasado se robaron 500 metros de conductor de 50 m2 de cobre, de la línea en media tensión, ubicada en ruta provincial 65, en cercanías de Fernández Oro, se informó.

En tanto, durante la madrugada de ayer se detectó y denunció un nuevo robo de 1.200 metros de conductor de cobre de 16 mm2, línea de MT, próxima a Barrio Santa María Goretti, por ruta chica.

Este hecho provocó la suspensión del servicio a un amplio sector ubicado por Ruta 22, comprendiendo los barrios Santa María Goretti, Santa Lucía, Puente 83, y sector de la Bodega Estepa, indicaron voceros de la empresa eléctrica.

"El personal de Edersa trabaja desde ese horario tratando de normalizar el servicio, (pero) por el momento quedan alrededor de 300 suministros fuera de servicio, los que se espera reponer en pocas horas más", se indicó durante la tarde de ayer.

Se destacó que la empresa "viene haciéndose cargo de los costos de reposición del material robado".