NEUQUÉN (AN)- Familiares de Mario González, un joven que murió baleado por la espalda por un policía hace dos años, denunciaron ayer que los reprimieron frente a la comisaría de Plottier, donde intentaron realizar un acto de conmemoración del crimen. Cinco personas permanecían anoche detenidas.
Los incidentes se produjeron pasadas las 20 frente a la comisaría Séptima. Marisa, cuñada de Mario González, dijo que fueron alrededor de 20 personas, mayoría de mujeres y niños, las que se concentraron frente a la unidad. "Estábamos haciendo palmas cuando salió la policía, nos corrieron y nos agarraron de los pelos".
En diálogo telefónico con "Río Negro" agregó que "no estábamos haciendo nada, los policías nos pegaron, dispararon, tenemos un cartucho que lo demuestra". Repudió que el policía que mató a su cuñado, absuelto por la justicia, está trabajando en Zapala.
La madre de González fue una de las que sufrió las consecuencias, y debió ser atendida por los médicos. Las corridas se extendieron hasta las vías del ferrocarril.
Por su parte el jefe de la zona perimetral I, comisario Juan Carlos Escobar, dijo que los manifestantes "pintaron las paredes de la comisaría y luego arrojaron piedras. No venían con un petitorio ni con intenciones de dialogar"
Agregó que la orden fue "dispersarlos sin usar armas. No se dispararon balas de goma ni gases lacrimógenos". Confirmó que cinco personas fueron demoradas, entre ellos un menor de edad, "por disposición del juez de turno".
González (27) murió el 26 de noviembre de 2005 baleado por Luis Alarcón, un agente del nuevo cuadro de 30 años. Fue alrededor de las 13 en la zona de chacras de Plottier. La víctima estaba acompañado de su hijo de 7 años y su sobrino de 17. El policía fue absuelto.
