Una mancha de combustible emergió anoche tras el hundimiento del crucero y cubrió una zona de 3.600 metros cuadrados, a unas 26 millas de la isla 25 de Mayo (Rey Jorge). La tripulación del buque naval chileno Viel, que observó en directo el hundimiento, intentaba anoche dispersar mecánicamente el combustible, así como recoger restos y balsas que están a la deriva.

El vocero del gobierno chileno, el ministro Ricardo Lagos Weber, precisó que el barco no usaba petróleo crudo, lo que mitigaría el impacto ambiental. En la zona habitan diferentes especies de pingüinos, elefantes marinos y focas, que se alimentan de peces y plancton. Por eso, la secretaria de Medio Ambiente, Romina Picolotti, sobrevolará hoy la zona del accidente. La intención es evaluar los daños ambientales resultantes del naufragio e implementar un plan de salvataje y remediación.