NEUQUÉN (AN).- Le agarró el bajón en el segundo tiempo y su adversario no lo desaprovechó. Obras Sanitarias fue otra vez la peor pesadilla de Independiente, que cayó en el Ruca Che, por 96 a 78.

Había sido el único equipo que lo había vencido dos veces en la primera fase de la Liga Nacional. Y anoche no fue la excepción. El 'Rojo' tuvo el control del partido en los primeros 20 minutos, pero en los últimos dos cuartos Obras lo destrozó.

Conociendo el 'paño', Independiente hizo un perfecto planteamiento del juego. En ataque, apeló a la fuerza goleadora de Byron Johnson y a la potencia física del cada vez más influyente Jeff Aubry. Pero el partido comenzó a ganarlo en defensa, porque no le dio respiro a los mejores jugadores de Obras.

En esos primeros 20 minutos, Aubry hizo valer sus 2,08 metros debajo del aro propio. Además, tanto Martín Melo como Johnson se encargaron de borrar de la cancha a Chris Jeffries, que en el último triunfo de Obras en el Ruca Che marcó nada menos que 36 puntos, con 7 de 8 en triples.

Claro, como siempre, Johnson fue determinante en ataque, y se fue al descanso largo con 12 puntos, siendo el goleador del partido. Por el lado de la visita, Lázaro Borrel anotó una decena y Jeffries apenas encestó seis. Así, Independiente terminó el primer tiempo arriba, por 46-37.

Pero todo se desmoronó en el tercer cuarto. Independiente entró en un incomprensible desconcierto táctico, y general, y Obras lo aplastó. Ese parcial terminó nada menos que 12-27 a favor de los porteños, con una gran tarea de sus perimetrales. De esos puntos, 15 fueron de triples: tres de Gabriel Cocha, uno de Borrel y el restante de Fernando Titarelli. El 'Rojo' era una sombra en la cancha, y para colmo comenzó a pesar Jeffries.

El último cuarto se vio al local desorientado y abatido, mientras Obras disfrutaba su paternidad.