CENTENARIO (ACE).- El padre de José Ignacio Tissera quiere que el gobierno de la provincia ofrezca una recompensa para quien aporte datos sobre su hijo desaparecido hace más de 40 días.
Tissera, un joven de 17 años, robusto, de cabellos castaños y más de 1,70 metros de altura, se fue de su casa el 10 de octubre pasado con una mochila y algunas prendas de vestir en su interior.
La mochila fue hallada unos diez días después, en inmediaciones de un puesto en la meseta de Planicie Banderita, pero sin que el hallazgo de las prendas, el reloj y la mochila pudieran aportar pistas de qué pudo haber pasado con el adolescente.
"Lo que yo quiero es que el ministro (Jorge) Lara active la recompensa; necesitamos que el ministro apruebe la recompensa para que la gente se anime a dar datos y podamos tener más pistas", dijo ayer Robustiano Tissera.
Según reconoció, hizo la solicitud "al aire" en diferentes medios, pero no se formalizó en una audiencia con el ministro o en algún petitorio escrito.
Desde que el joven desapareció se realizaron rastrillajes, búsqueda con helicóptero y diversos procedimientos cuyos resultados fueron infructuosos.
A más de 40 días de su desaparición, no hay testigos que tuvieran la certeza de haberlo visto, o indicios de cuál pudo haber sido su paradero. El dato de que el adolescente se habría ido hacia la meseta fue aportado por su padre en el mismo momento de la desaparición, y la mochila en la zona de bardas confirmó esta presunción, pero no aportó indicios ni para establecer alguna hipótesis de su rumbo.
Tampoco aportó nuevos datos el allanamiento de la vivienda de Robustiano, luego de que su ex mujer denunciara que se había ido de la casa por problemas de violencia familiar. "No sólo lo pido yo, sino sus compañeros y la gente que nos acompaña: todos necesitamos saber qué pasó", dijo el hombre.
