NEUQUÉN (AN).- El secretario de Cultura, Reynaldo Labrín ,dijo ayer que fue una "operación" lo que impidió el tratamiento legislativo de su proyecto de ley de autarquía para la Orquesta Sinfónica de la provincia. Y responsabilizó de esa maniobra a las autoridades de la Fundación del Banco Provincia de Neuquén, administradora de los fondos que financian al grupo de músicos.

En medio de los duros cuestionamientos, además renunció a su cargo como director de la orquesta y le pidió al presidente de la Legislatura, Federico Brollo, que retire de tratamiento de la propuesta de nueva normativa.

Las acusaciones del funcionario llegan luego de que los diputados del MPN desnudaran posturas contrapuestas y aplazaran el proyecto de Labrín, quien no anduvo con medias tintas y puso nombre y apellido a los que para él son responsables del fracaso del texto.

"Hubo una operación en contra de esta ley, y la responsable es la señora María Angélica Carnaghi", dijo. Se trata de la actual presidenta de la Fundación del BPN. Dijo que durante los últimos días hubo "críticas con mucha bajeza. Y esto fue permitido por la conducción de la Fundación, que estaba en desacuerdo con esta ley". Ayer Carnaghi no quiso hacer declaraciones públicas. Pero confirmó que el organismo que encabeza sigue administrando los fondos para que funcione la orquesta.

El otro cuestionado por Labrín fue su segundo al frente de los músicos, Andrés Tolcachir. "El director adjunto también trabajó en contra de todo esto (por la ley). Yo le di la posibilidad de terminar de formarse", sentenció. Tolcachir tampoco quiso hacer declaraciones. Labrín, por otra parte, dijo que después de su paso al costado quedará en manos de la Fundación cómo sigue la actividad de la orquesta.

Señaló que hay imposiciones en contra del BPN que afectan el apoyo para el grupo de artistas. "La orquesta no puede seguir en la Fundación, porque no resiste económicamente. Esto es una imposición del Banco Central de la República Argentina al banco provincia. Eso lo sabe todo el mundo", aseguró.

En otro tramo, habló de los motivos que lo llevaron a sacar de la Legislatura su propuesta de ley. "Hubo un bombardeo sobre la ley. Algunos han dicho públicamente que me estaba haciendo un traje a medida. O que me hacía un kiosco. No necesito nada de eso a esta altura de mi vida", dijo. Agregó que "la ley era un paso adelante para el funcionamiento" y dijo que con un presupuesto propio se podría producir una mejora en las condiciones de vida de los músicos.

"Ahora no tienen estabilidad laboral. Todos los fines de año se caen los contratos. Los bancos no les dan créditos por el vínculo laboral que tienen", enumeró.

Dijo que otro de los motivos para su paso al costado fue "esta pobre discusión política e ideológica" que "estaba rozando a mí persona, y para ser coherente elevé el retiro del proyecto".