Fueron la cara y la ceca de la cuarta fecha de las Eliminatorias. Mientras Paraguay delira por su espectacular momento y está por encima de Argentina y Colombia, aparecieron las primeras críticas para Marcelo Bielsa en Chile. El contundente 3-0 de los guaraníes a domicilio fue "el" resultado del cuarto capítulo y dejó mucha tela para cortar.

El equipo dirigido por Gerardo Martino hizo del orden táctico su principal virtud y logró cortar todas las posibilidades creativas del rival.

"Nueva goleada instala a la albirroja en lo más alto", "Paraguay en la cima" y "Con soberbia actuación Paraguay termina el año como líder", fueron los titulares de los principales diarios sobre el triunfo.

"Contundente, sensacional, maravilloso, imparable, son algunos términos que se ajustan al momento que vive la selección", afirmó el diario Ultima Hora".

"Es un gran cierre de año para la selección que dirige Martino, que incluso sorprendió al dejar en el banco a Roque Santa Cruz", aseveró el matutino, y concluyó en que "la solidaridad, la actitud y la solvencia en todas las líneas son las virtudes de este equipo que marcha con firmeza hacia el mundial".

Del otro lado, pura frustración. El propio Bielsa, que hasta antes del cotejo era sinónimo de unanimidad, admitió sus errores en la conformación del plantel y los cambios, ante una prensa crispada.

No obstante, el "Loco" aseguró que vio "a un equipo derrotado, pero con vida", en alusión a la vocación ofensiva de sus pupilos, que ahora deberán reconstruir ilusiones de visita ante Bolivia y Venezuela en junio de 2008.

Para el DT, la "Roja" no será respetada mientras no sepa manejar resultados, como dijo tras dejar escapar la victoria en Montevideo, donde Chile empató después de estar 2-1 arriba hasta el minuto 82. "Todavía nos falta para ganar este tipo de encuentros", reconoció esa noche.

Y es que quizás Bielsa jamás imaginó que a nivel de una selección un equipo cometería "errores de barrio", como reconoció Claudio Bravo luego del 0-3.