Para las amantes de las Barbies, un paraíso terrenal. Para sus detractores, el mismísimo infierno.
En cualquier caso, en el centro de Buenos Aires abrió Barbie Store, una tienda dedicada exclusivamente a la emblemática muñeca rubia.
En realidad, se trata de un salón de belleza donde las niñas pueden maquillarse, peinarse y hasta vestirse como ella. Una buena manera de sentirse por unas horas la muñeca que desde hace más de 5 décadas ha hecho las delicias de las más pequeñas y ha inspirado tantas críticas por su supuesta influencia en los cánones de belleza femenina actual.
El salón está perfectamente equipado. Desde el auto, igual al accesorio de la muñeca, que espera en la puerta de la tienda, hasta el interior. Decorado en tonos rosas, como no podía ser de otra manera, las niñas tienen la posibilidad de desfilar vestidas como su muñeca por una pasarela propia de la muñeca Barbie.
Uno de los requisitos imprescindibles para entrar en este salón de Barbie es tener entre tres y doce años. Ni más, ni menos. Y otro, que mientras las niñas juegan, los padres esperen en el Barbie Café. Al menos hasta la hora de pagar la cuenta.