NEUQUÉN (AN).- Los transportistas escolares del Consejo Provincial de Educación (CPE) endurecieron ayer el paro que desde la semana pasada realizan en tres de los ocho distritos educativos y advirtieron que no volverán a trabajar hasta que haya un compromiso de pago formal. La réplica se dio en rechazo al ofrecimiento del gobierno provincial de abonar este miércoles los honorarios de agosto y en diciembre los correspondientes a septiembre.

Por segunda semana consecutiva más de medio centenar de colectivos y conductores de combis que prestan servicios para el CPE cortaron con sus vehículos el tránsito en las manzanas que rodean a Casa de Gobierno en reclamo del pago adeudado de tres meses de horarios. Ayer el reclamo se endureció e incluso se deslizó la posibilidad de cortar el puente que une esta ciudad con Cipolletti, si desde el gobierno no se comprometen nuevos pagos antes de fin de año.

"Los choferes rechazamos el ofrecimiento de la presidenta del CPE, Mara Álvarez, porque implica que en el caso en que paguen los honorarios de septiembre a tiempo, va a pasar medio año para que cobremos los otros tres meses de este año", aseguró uno de los afectados, Adrián Beroiza.

Por medio de un comunicado difundido ayer por el gobierno provincial, se indicó que los honorarios adeudados de agosto serán abonados mañana, en tanto que los correspondientes a septiembre serán pagados el próximo 5 de diciembre. "Esto quiere decir que los pagos de octubre, noviembre y diciembre van a quedar para el próximo gobierno y, si nos guiamos por lo que pasó en los últimos años, los vamos a estar cobrando entre abril y mayo del año que viene, cuando con ese dinero no vamos a poder pagar los gastos por los aumentos que está habiendo", advirtió Beroiza.

El paro de los transportistas afecta a cerca de 5.000 alumnos de los niveles primario, medio y escuelas especiales. En el caso de la colonia rural Nueva Esperanza de esta ciudad, ayer un grupo de vecinos reclamó una solución urgente, ya que advirtieron que cerca de 300 chicos no están asistiendo al colegio por la falta de frecuencias en el servicio de micros de la empresa Indalo.

"A la mañana están yendo 100 personas en un cole que es para 30 y por los horarios los de la tarde no pueden ir", explicó Elida Caso, que reclamó una respuesta por parte de las autoridades municipales y provinciales.