NEUQUÉN (AN).- Bandas ópticas y sonoras, lomadas y derivadores construirá la municipalidad en las colectoras de la multitrocha de la Ruta Provincial 7 en un intento de bajar la cantidad de choques protagonizados por vecinos que habitan en alguno de los diez barrios de este sector de la ciudad. Además, se asignará un único sentido de circulación vehicular a los dos primeros puentes carreteros.
El intendente Horacio Quiroga firmó el decreto autorizando estas medidas acopladas a una serie de obras complementarias, publicado en el boletín oficial del viernes.
El decreto no precisa la fecha de implementación de las nuevas medidas, aunque algunas de las etapas previstas ya han sido ejecutadas. Un ejemplo son la construcción de derivadores e isletas en el área del segundo puente, a la altura de los barrios 14 de Octubre y Salud Pública. Falta completar el trabajo con el pintado de los cordones y la señalización vial.
De todos modos el decreto prevé la realización de operativos de tránsito por tiempo indeterminado hasta tanto los conductores internalicen los cambios.
Con esta planificación, los vehículos accederán al primer puente únicamente en sentido oeste-este, en dirección al barrio Copol.
En dirección contraria circularán los coches en el segundo puente, ubicado a la altura de los barrios 14 de Octubre y Salud Pública.
De modo que los conductores que tengan que acceder a los barrios Salud Pública y Patagonia deberán proseguir por la colectora este, cruzar el segundo puente y acceder a estos sectores por la calle Madreselva, a la altura de Los Alelíes o Las Dalias.
El municipio construirá en la colectora oeste corre por Salud Pública y Alta Barda un cordón divisorio con la calle Madreselva y colocará lomadas.
También bajará 40 centímetros la baranda sur de protección peatonal del puente número uno. En este sector se produce un "punto ciego" de visibilidad, denominado de este modo porque no se ven los coches que aguardan paso para ingresar a la colectora de los barrios Copol y 14 de Octubre.
Sobre las dos colectoras y metros antes de la intersección con los dos puentes, con pintura termoplástica se demarcarán bandas "reductoras" de velocidad visibles de día y de noche, que producen vibraciones en la estructura de los vehículos que las traspasan. Son del tipo de las colocadas en sectores de la multitrocha de la Ruta Nacional 22.
De color amarillo vial se pintarán, por otra parte, las lomadas que obligarán a los conductores a manejar con cuidado en el tramo que une la colectora del oeste con la calle Madreselva.
La división proyectos de Tránsito diseñó este trabajo para atenuar la frecuencia de colisiones entre coches que circulan a "altísima velocidad" en las colectoras y aquellos que acceden a las calles laterales por los puentes.