SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- El intendente Alberto Icare aseguró ayer por la FM Radio O que reasumirá el 10 de diciembre y que el próximo martes dará una conferencia de prensa. Icare, quien ganó por amplio margen la última elección municipal pese a estar muy enfermo, fue entrevistado por el periodista Juan Carlos Jalil a la salida del tratamiento que realiza diariamente en Neuraxis, el centro de rehabilitación kinesiológico local.

Lúcido, pero con dificultades para caminar, el intendente indicó que el martes 20 brindará una conferencia de prensa. También ratificó que asumirá su nuevo mandato. Fue el primer contacto con un periodista luego de la infección pulmonar que puso en riesgo su vida, hace dos meses, y por lo que fue derivado al instituto Fleni de Buenos Aires.

El jefe comunal está realizando una rehabilitación con el kinesiólogo-fisiatra Guillermo Giustozzi, según se confirmó ayer mediante una nota dirigida al Concejo Municipal donde el propio Icare solicitó la prórroga de su licencia hasta el 10 de diciembre, sin aventurar nada acerca de su posible asunción para la nueva gestión.

Ayer los cinco concejales opositores, perdedores por amplio margen ante el Frente para la Victoria en la elección comunal, emitieron una nota en la cual le solicitan a Icare que "con su propia voz y a través de la radio y televisión de la ciudad", informe sobre su enfermedad.

En particular, Laura Alves y Claudio Otano, de la UCR, Darío Rodríguez Duch (ARI), Daniel Pardo (PPR) y Francisco De Césare (Partido Socialista) le preguntaron "si su vista le permite leer y escribir por sus propios medios" y "si puede pararse, sentarse y caminar" sin ayuda.

Los ediles electos también le solicitaron explique "cuántos días por semana y cuántas horas de cada uno de esos días le insume la hemodiálisis" y si Icare se sentía "en condiciones de viajar a Viedma y Buenos Aires para gestionar, pedir y exigir las soluciones que continuamente demanda nuestra ciudad".

Esta carta causó profundo malestar entre los allegados a Icare, quienes catalogaron sus palabras como golpes bajos, a sabiendas de que "el Beto" recién se está recuperando.