Arsenal "vive un sueño", según aseguró su entrenador Gustavo Alfaro, tras vencer a River y alcanzar la final, por primera vez, de una copa Sudamericana, y si bien consideró trascendente el paso, va a buscar ante el América de México, entrar en la historia. "Quedan 180 minutos para que Arsenal haga una historia más grande de la que ya está viviendo", sostuvo Alfaro con vistas al encuentro ante el poderoso equipo azteca.

"Estar en la final es un sueño hecho realidad porque este equipo tuvo la virtud de soñar y no quedarse detenido en ese sueño, sino trabajar 90 minutos para cristalizarlo, lo cual nos impulsó a jugar una final y ganarla en la cancha de River", analizó Alfaro. "En los penales estábamos convencidos de que ganábamos. Que los íbamos a hacer y que Mario iba a atajar algunos" dijo y reveló que Cuenca, el arquero convertido en héroe de la noche" por su actuación en el tiempo regular pero también por atajar dos penales y convertir el del festejo, le había pedido patear el decisivo.

"El coraje es el que hay que rescatar y el sentir del fútbol. La infiltración que soportó San Martín antes de empezar el partido no cualquiera la soporta", destacó. Pero también homenajeó a las familias de los futbolistas: "Con sus mensajes nos hicieron sentir que los poquitos que éramos, éramos más que los 60.000 que estaban afuera". (DyN)