Martes 13 de Noviembre de 2007 Edicion impresa pag. 30 > Sociedad
Postales del día después, en un pueblo con estima alta
Chimpay, orgullosa por la fiesta que organizó. Creen que cada agosto vendrán más fieles.

CHIMPAY (AVM).- Retirada la marea humana que copó el domingo Chimpay, para asistir a la beatificación de Ceferino Namuncurá, la ciudad volvía lentamente ayer a su tranquilo ritmo habitual.

Todos coincidían en resaltar que se trató de una fiesta y que se recogieron los frutos del trabajo organizado, dado que no hubo quejas y, por el contrario, los visitantes se mostraron agradecidos ante el trato de los locales.

"Yo tengo un hermano que tiene comercio y toda la gente que entraba no dijo más que sentirse conforme con la organización" dijo el presidente del Concejo Deliberante, Daniel Hernández.

"Fu muchísima la gente que entró en todos los negocios. Desde la iglesia se menciona que entraron 120.000, desde la policía se barajan cifras que rondan las 150.000. Y nosotros que junto a algunos funcionarios hicimos un cálculo cuando veníamos en vuelo creemos que fueron poco más de 100.000 las personas que estuvieron el domingo" sostuvo el edil.

Pero más allá de la disimilitud de los números, por la imposibilidad de llevar un registro claro, lo cierto es que una multitud colmó el domingo la pequeña localidad de la ruta nacional 22 en un acto de fe hasta ahora único en el país.

Muchas personas, incluso desde medios zonales, especulaban con que esto podría provocar una situación caótica. Pero lejos de eso el balance arrojó un saldo más que positivo.

"La gente se retiró más que contenta. Porque además vino a participar de una fiesta y así se vivió" dijo el padre Ricardo Nocetti, uno de los puntales más importantes en la celebración religiosa.

"Se dio un fenómeno muy particular. Por ejemplo, la gente que estaba en los estacionamientos juntó la basura y la puso en bolsas. Creo que los visitantes han tomado conciencia de que todos son protagonistas" agregó Hernández.

Ante esto aumentan las expectativas de que las celebraciones de agosto crezcan en convocatoria. "Este es un fuerte espaldarazo. Por eso estamos convencidos que seguirá aumentando el número de visitantes y fieles en agosto" acotó Nocetti.

Ayer un enjambre de trabajadores municipales desarmaba globas, recogía residuos, y hacia las tareas posteriores a la fiesta A ellos los miraba una veintena de vendedores que decidieron seguir en el predio hasta comercializar todo lo que trajeron. "Las ventas se dieron bien sobre todo el domingo. Al principio pensamos que no iba a venir mucha gente. Pero después se pobló todo y repuntamos" , dijo Marcelo mientras armaba sus bártulos.

Pero no eran los únicos que habían decidido quedarse. En el parque aún quedaban algunos acampantes que estiraban su estadía en el lugar.

Use la opción de su browser para imprimir o haga clic aquí