SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- El intendente Alberto Icare ya está recuperado por completo de la infección pulmonar que a comienzos de setiembre lo puso al borde de la muerte, pero aún sigue bajo tratamiento por su diabetes, su disfunción renal y las últimas complicaciones neurológicas.

La jefa de Terapia Intensiva del Sanatorio San Carlos, Andrea Galaverna, difundió ayer un nuevo parte sobre la salud de Icare en el cual señala que su actuación profesional finalizó y que en adelante cualquier nuevo dato deberá ser requerido a los allegados del intendente.

La escueta información no echa luz sobre la aptitud de Icare para volver a la intendencia y asumir el 10 de diciembre un nuevo mandato, para el cual fue elegido el 1 de julio.

Tampoco su familia atendió ayer los requerimientos telefónicos y un funcionario municipal de su más estrecho círculo le aseguró a este diario que Icare perdió peso y estuvo "muy débil", pero ahora está "en franca mejoría".

En el Concejo Municipal dieron por hecho que no puede gobernar todavía porque dejó pasar el plazo de 40 días concedido por resolución para el interinato de Marcelo Cascón a cargo del Ejecutivo.

"Los 40 días se cumplieron el sábado y como Icare no se presentó el reemplazo quedó extendido automáticamente", dijeron en el Concejo.

El intendente titular está apartado de la función desde el 6 de septiembre, cuando fue internado en terapia intensiva con una severa infección pulmonar. Poco después debieron internarlo por una nueva recaída y al presentar señales de una afección neurológica, los médicos decidieron enviarlo al sanatorio Fleni, de Capital Federal.

Luego de dos semanas, Icare volvió a su domicilio, pero nunca hubo desde entonces nuevos comunicados públicos sobre su cuadro de salud.

Tanto Cascón como el titular del cuerpo legislativo, Andrés Martínez Infante, pidieron la semana pasada un nuevo informe médico. Ayer la doctora Galaverna presentó el siguiente parte: "A partir del día de la fecha el señor Alberto Icare ha finalizado el período de convalecencia en domicilio que venía desarrollando a causa de la infección grave que puso en riesgo su vida hace dos meses".

Agregó que actualmente Icare "continúa con el tratamiento de sus dolencias crónicas" y que "a sugerencia del centro de mayor complejidad al que fue derivado para obtener segundas opiniones sobre situaciones puntuales que se observaron en su evolución, comenzará una nueva etapa de rehabilitación".

Por último, apuntó que en adelante las novedades sobre la salud de Icare serán informadas "por su entorno más cercano".

Consultado luego por este diario, el director de Seguridad del municipio, Roberto Molina, dijo que Icare "está muy bien y en franca mejoría". Aseguró que los médicos que lo tratan actualmente "le cambiaron los medicamentos" y que está realizando un plan de rehabilitación kinesiológico a fin de superar el cuadro que obligó a internarlo en el Fleni.