BUENOS AIRES.-Luego de haberse instalado la idea de que el ministro de Economía, Miguel Peirano, no continuará en su cargo en la administración de Cristina Kirchner, el Gobierno mantuvo ayer un absoluto silencio, lo cual acrecentó la ola de rumores y especulaciones.
"El presidente se molestó muchísimo con el hecho de que la noticia haya saltado de esta forma a la tapa de los diarios", fue el comentario más concreto que surgió de fuentes vinculadas al primer mandatario, Néstor Kirchner.
En Economía la respuesta fue única y repetida durante todo el día: "No hay nada para decir", en obvia alusión a la catarata de preguntas que buscaban conocer el paradero de Peirano. Entrada la noche un portavoz ministerial comunicó que el ministro había culminado sus tareas por el día de la fecha y que "mañana vendrá a trabajar normalmente". La posibilidad de que Peirano no continúe al frente de la cartera de Hacienda en el próximo Gobierno se conoció ayer y tomó especial cuerpo, dado que era uno de los ministros con mayores posibilidades de conservar su puesto.
(DyN)