SAN MARTÍN DE LOS ANDES (ASM)- La comunidad Curruhuinca del paraje Trompul, que involucra a unas 70 familias, plantó bandera contra la Confederación Mapuche y advirtió que no aceptará la intervención de esa organización en el novedoso proyecto de plan intercultural de viviendas, que se impulsa para un lote que en la actualidad está bajo la jurisdicción del parque Nacional Lanín.

El lote 27 es un predio de unas 500 hectáreas en Pampa de Trompul, camino a Hua Hum y en pleno corazón del área protegida, históricamente reclamado por los mapuches. Semanas atrás se dio un paso decisivo con ese fin, al reconocer el directorio de Parques como de "interés institucional" al de barrio intercultural.

Pero el kona (representante) de la comunidad Curruhuinca, Ariel Epulef, dijo que esa agrupación, conforme lo decidido en asamblea, desautoriza "plenamente" al lonco Diego Cayún en la toma de decisiones sin el consenso del paraje Trompul, debido a que "su mandato como máxima autoridad finalizó en setiembre".

Precisamente, Cayún fue uno de los que se sentó a la mesa de diálogo con las autoridades del Parque Lanín, el municipio de San Martín, la Comisión de Vecinos sin Techo y la Confederación Mapuche, la semana pasada y por el futuro del lote 27, que lleva ya tres años de esfuerzo conjunto y negociaciones de alcance nacional.

Un comunicado difundido por la comunidad Curruhuinca reafirma el derecho ancestral por ese predio, y advierte que respetará los acuerdos firmados con los Vecinos sin Techo en julio de 2004, pero sin intervención alguna de la Confederación Mapuche. Epulef explicó que el enojo se sustenta en que esa organización "toma decisiones desconociendo la voluntad de los parajes y comunidades, resueltas en asambleas". El rechazo alcanza también al llamado plan de "comanejo", en el que interviene Parques y la Confederación Mapuche.

Asimismo, explicó que "nosotros estamos trabajando y respetando en un todo el consejo de nuestros mayores, que quieren contribuir con el proyecto intercultural, pero quieren ser escuchados y respetados".

En consecuencia y para las negociaciones por el futuro del lote 27, Trompul sólo reconoce como sus representantes al kona Epulef y a los pobladores José Catricura, Felipe Huenteo y Jorge Lemunao, y a aquellos que la próxima asamblea de la comunidad designe como tales por otros parajes.

Por último, advierte el escrito que la comunidad Curruhuinca aún no ha decidido en asamblea la cantidad de hectáreas a destinar al proyecto intercultural.