ROCA (AR)- Tras el operativo policial del jueves por la noche, que permitió detener a dos sujetos -uno de ellos un policía de Río Negro-, ayer en la madrugada se realizaron varios allanamientos que, sin embargo, no arrojaron los resultados esperados.

Según se informó desde la Unidad Regional II, tras la detención de los dos individuos que fueron interceptados cuando intercambiaban elementos como chalecos antibalas y un equipo de comunicación con la frecuencia policial, se realizaron operativos en distintos domicilios de familiares y allegados a estos individuos, en busca de armas de fuego.

Se aclaró que en el lugar donde se realizaron las detenciones no se hallaron armas, aunque sí en uno de los allanamientos efectuados durante la madrugada de ayer se encontró una pistola 9 mm, municiones y un chaleco antibalas. Todo se habría secuestrado de la casa del uniformado.

Los allanamientos, ordenados por el juez Pablo Iribarren, se efectuaron en distintas viviendas particulares ubicadas en barrio Nuevo, en cercanías al aeropuerto local, otro sobre calle San Juan y por último en Alfonsina Storni.

Ayer se conoció que los primeros datos sobre el delito que se estaba ideando llegaron a oídos de la justicia y enseguida se coordinó con las autoridades policiales un operativo para interceptar y detener a los sujetos. El plan finalmente se realizó el jueves por la noche, a la altura de la calle Gelonch y Mendoza.

Los efectivos contaban con información sobre un encuentro, en ese sitio, entre los dos sujetos que planificaban el robo. Y allí fue donde, a bordo de un Renault 18 se logró detener al efectivo policial -vestido de civil-, que prestaba tareas en la Comisaría Tercera de esta ciudad, y a un hombre que sería su cómplice.

Según trascendió, el policía apresado sería mayor de 20 años y de apellido Bustos, en tanto su acompañante se apellidaría Longo. Este último tendría antecedentes y no sería oriundo de esta ciudad.

Los investigadores creen que el círculo se cerraba en ellos dos y se estima que ambos planearon, pero tal vez sólo uno de ellos tenía pensado actuar, en un robo calificado que -según la información que manejaban la Policía y la justicia- se iba a concretar al mediodía de ayer a la salida de la municipalidad de Roca.

Las autoridades comunales se mostraron sorprendidas ayer por el hecho, aunque dejaron entrever que la tarea de los delincuentes no se había planificado con demasiada "inteligencia" ya que ayer no estaba previsto ningún movimiento importante de dinero en efectivo.

El intendente Carlos Soria prefirió no opinar mayormente sobre el tema, aunque ante algunos medios señaló que "por suerte no pasó nada y se tomaron todas las medidas del caso, pero se iban a llevar un gran chasco", dijo. "Las tareas de inteligencia que hicieron... son muy poco inteligentes -señaló Soria- porque la mayoría son operaciones electrónicas y el efectivo que se maneja es muy poco", indicó.

Sobre la situación del efectivo, se indicó que se iniciará un proceso de investigación interno y, según el reglamento policial, si existe una condena firme en su contra puede ser pasible de la exoneración de la fuerza.