NEUQUÉN (AN).- La polémica tasa de uso general que generó juicios y la huida de las empresas de colectivos de media y larga distancia de la terminal de Neuquén fue eliminada y con ello las autoridades suponen que habrá más movimiento y los pasajeros consumirán en los negocios de la estación.

Ocurre que los comercios de la terminal agonizan por falta de clientes, lo cual explica la intensa rotación de dueños y de rubros.

El escaso movimiento también se refleja en que la gerenciadora Taym recibe subsidios por 2.700.000 pesos porque nunca alcanzó los ingresos contractuales mínimos pactados con la municipalidad para administrar la estación de ómnibus. Se estiman en 5.000.000 los costos operativos.

La eliminación de la tasa de uso general era el guiño que esperaban las cámaras empresariales para regresar a la terminal, "persuadir" a sus afiliadas turísticas a realizar paradas en el trayecto de ida y vuelta de las ciudades cordilleranas, y levantar los juicios entablados contra la municipalidad.

El enfrentamiento entre las transportistas y el gobierno de la ciudad se produjo hace tres años, cuando la Defensoría del Pueblo denunció que las empresas trasladaban a los pasajeros el pago de la tasa de embarque de dos pesos por persona transportada a más de 500 kilómetros de distancia, contrariando la letra de la ordenanza.

La ordenanza establecía que esta tasa debía ser soportada por las empresas.A la arremetida de las autoridades de hacer cumplir la norma las empresas respondieron con una suerte de "lock out" bajando las persianas de sus oficinas en Neuquén y centralizando la actividad comercial en las terminales de Cipolletti y de Plottier. Desde entonces los servicios Cipolletti.San Martín y Cipolletti-Bariloche pasan por alto Neuquén.

"Los hechos han demostrado que la tasa de uso general de la terminal fue una complicación", admitió el radical Fabián Pelliza en el recinto, momentos antes de que el Concejo Deliberante aprobara la eliminación de este tributo.

En la votación cinco de los 10 concejales del Movimiento Popular Neuquino votaron en contra, al interpretar que esta medida privilegia más a los intereses de privados que al estatal en momentos en que la terminal trabaja a déficit.