NEUQUÉN (AN).- El anuncio del gobernador Jorge Sobisch de que demandará a la Nación por la falta de agua en Picún Leufú fue tomado por los funcionarios de la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas (AIC) como un contrasentido porque la administración neuquina convalidó el manejo de los embalses que hizo que la captación para la ciudad quedara en el aire. Hace meses se sabía que esto podía pasar.
Sobisch dijo que presentará un recurso de amparo para que Piedra del Águila libere el agua que haga subir el embalse de El Chocón.
La posición del mandatario fue cuestionada por un funcionario de su gobierno, el representante de Neuquén en el comité ejecutivo de la AIC, Elías Sapag (hijo), al que todos conocen por "Gringo". "Esto es un pacto federal entre tres provincias y la Nación", hizo notar.
La AIC está integrada, además de Neuquén, por las provincias de Río Negro y Buenos Aires, y el ministerio del Interior. Fueron sus representantes los que pactaron con la secretaría de Energía de la Nación un modelo de operación de las presas del Limay que, durante el invierno, privilegiara la generación de electricidad en las centrales de los tramos más altos del río, para ir reservando recursos en El Chocón.
Lo que se está haciendo ahora es, precisamente, revirtiendo aquella operación: se reserva en los tramos altos y se usa lo almacenado en El Chocón.
El gobierno de Sobisch convalidó aquella y esta operación de la cuenca, de ahí que a Sapag le resulte por lo menos confusa la posición de la provincia.
No escapa a nadie que el representante de Neuquén en la AIC es hermano del gobernador electo Jorge Sapag, al que Sobisch responsabiliza por la derrota de su candidatura presidencial en Neuquén.
"Gringo" Sapag informó que el 2 de julio le envió una nota al EPAS en la que advirtió que esta operación extraordinaria de los ríos de la cuenca podría provocar inconvenientes en las obras de captación de agua.
El acuerdo de la AIC con la secretaría de Energía era que Nación financiaría la adaptación de las tomas de agua a los niveles de los ríos. El 13 de agosto el EPAS le envió a Sapag el listado de necesidades, entre ellas el muelle de captación de agua con una bomba sumergible en Picún Leufú.
Sobisch "no me convocó a hablar de este tema", protestó Sapag. En cambio, hubo hasta empresas privadas que lo llamaron porque sus tomas de riego habían quedado en el aire.
El funcionario responsabilizó por la falta de agua al intendente Aníbal Jerez.
