NEUQUÉN (AN)- Roberto Espina tiene 78 años y le cuesta trasladarse, pero ayer no quiso dejar de cumplir con su deber de ciudadano y fue a votar.
La ley electoral nacional exime del voto a los mayores de 70 años, sin embargo Roberto no consideró que su edad y su salud fueran un impedimento para entrar al cuarto oscuro.
"Es muy emocionante para mí. Este es un deber que ningún ciudadano debe desaprovechar. Hay que votar, se tengan 20 ó 90 años", aconsejó el abuelo mientras no podía impedir que las lágrimas de emoción le surcaran las mejillas.
Con su libreta de enrolamiento ajada y con varios sellos electorales encima, Roberto esperó a que los fiscales de su mesa le bajaran la urna hacia la planta baja porque él no podía subir al primer piso, donde estaban instaladas las mesas en la EPET 8.
En un improvisado cuarto oscuro que armaron las autoridades de mesa, Roberto Espina cumplió con su deber y cosechó el aplauso más emotivo de la jornada electoral de ayer.