SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- El gobierno provincial resolvió prorrogar las prohibiciones constructivas sobre la cota 900, mientras se define el financiamiento de los estudios que servirán de base al plan de ordenamiento territorial, que regulará la protección de los bosques andinos.
La medida resulta tan auspiciosa como riesgosa: la prohibición temporal impuesta a la construcción en los faldeos de los bosques urbanos desde octubre de 2006, mantiene frenadas varias obras en esta ciudad que aguardan una definición de la Provincia.
El delegado de la dirección de Bosques rionegrina, Germán Fritz, le explicó a este diario que la demora obedeció al fracaso de las gestiones realizadas ante el Consejo Federal de Inversiones, pero que los fondos serán aportados por el Ministerio de la Producción.
"El ministerio entendió que el estudio es necesario y decidió aportar los 100.000 pesos para iniciar el ordenamiento específico del cerro Otto", señaló el funcionario, que aspira a comenzar los trabajo de campo antes de fin de año.
El decreto con la asignación de fondos está a la firma del gobernador Miguel Saiz. Si prospera el financiamiento, en el primer semestre de 2008 quedaría listo el diagnóstico del cerro Otto, que será la punta de lanza del plan de protección de los bosques andinos.
Planificación necesaria
Fritz reconoció que reciben toda clase de presiones de los propietarios de lotes ubicados por encima de la cota 900. "Nos vuelven locos, pero por suerte el gobierno mantuvo las restricciones y dio luz verde para hacer este ordenamiento especial que es absolutamente necesario", dijo.
El funcionario recordó que el avance urbanístico sobre el cerro Otto "es muy crítico" y que las restricciones constructivas impuestas depreciaron los lotes ubicados sobre la cota 900, aumentando la especulación inmobiliaria.
En contrapartida, la delegación local recibió un mayor número de consultas del público interesado en esos lotes que ya no compra a ojos cerrados y sólo unos expedientes de viviendas unifamiliares -con proyectos anteriores a la prohibición de la Resolución 1239- lograron la autorización de obra.
Fritz volvió a cargar responsabilidades sobre el municipio por la falta de planificación y la laxitud de los código urbanos que permiten el avance de obras sobre ambientes frágiles, sin mayores restricciones ni control.
El funcionario anticipó a este diario que en los próximos días repetirá el pedido de una planificación urbana seria. "Lo que está impactando mucho es el desarrollo de módulos para turismo en áreas de bosque que son frágiles. Nosotros tenemos frenadas varias obras en la zona de Arelauquen y Los Coihues y lo que falta es información clara y precisa del ordenamiento territorial de la ciudad para que la gente sepa que hacer".
Una de las intenciones del estudio propuesto por la provincia es poner freno al desarrollo de los lotes Melipal II y III, que el municipio no pudo o quiso frenar pese a la seria advertencia del SEGEMAR y los estudios que indican la inestabilidad de suelos del faldeo superior del cerro Otto.
Las tres cuartas partes del cerro están afectadas por la construcción y los funcionarios de Bosques entienden que esto no puede continuar así sin causar graves perjuicios al medioambiente y las poblaciones asentadas laderas abajo.