La provincia de Buenos Aires será una vez más el distrito en el que se definirá gran parte de las elecciones presidenciales de hoy.
En esta provincia, el oficialismo optó por Daniel Scioli como candidato a gobernador y por Alberto Balestrini como postulante a vice. Esta fórmula es la favorita para los comicios de hoy, donde se verá quién tracciona la candidatura de quién. Si Cristina Kirchner la de Scioli, o a la inversa.
Son más de 10 millones los electores que están habilitadas en la provincia de Buenos Aires. También se elegirán diputados nacionales, legisladores provinciales, intendentes, concejales y consejeros escolares.
Los contendientes más fuertes de Scioli son el empresario Francisco De Narváez y Jorge Macri fórmula a gobernador y vice por la alianza Unión-Pro, que lleva a Jorge Macri como primer candidato a diputado nacional seguido de Lidia "Pinky" Satragno y Juan José Álvarez.
La fórmula de la Coalición Cívica está integrada por Margarita Stolbizer y Jaime Linares, presidente del bloque de diputados provinciales de la UCR y ex intendente de Bahía Blanca, mientras que la lista de diputados nacionales la encabeza Adrián Pérez, seguido de Eduardo Macaluse, María Virginia Linares, Juan Carlos Morán y Héctor Flores.
Jorge Sarghini y Carlos Brown componen la fórmula de Sociedad Justa, que a nivel nacional encabeza Roberto Lavagna con el partido UNA.
Bajo el sello de la UCR, Ricardo Alfonsín y Luis Brandoni son los candidatos a gobernador y vice que llevan como primer candidato a di
putado nacional a Rubén Lanzeta; mientras que Luis Patti-Adriana Tomaz conforman la fórmula del Paufe que tiene como candidato a primer diputado a Oscar Héctor Talia.
Por su parte, la Alianza Vamos propone al empresario Juan Carlos Blumberg como candidato a gobernador y primer diputado nacional, y a Patricio Caselli como vicegobernador.
El peronismo bonaerense -piedra angular del movimiento peronista-, sin caudillo visible al menos en la superficie y a 20 años del triunfo electoral de Antonio Cafiero que abrió las puertas a su supremacía de dos décadas en la provincia, enfrenta las elecciones alineado a la figura de Kirchner y con el partido integrado al kirchnerista Frente Para la Victoria.
Sólo el duhaldismo residual, encarnado por Camaño y Sarghini, probará en estos comicios por fuera de la estructura, igual que el foco de origen menemista que capitanea el empresario De Narváez. El escenario es consecuencia del combate electoral de 2005, cuando el ex presidente Eduardo Duhalde comprendió en carne propia el abandono de varios "incondicionales" y vio al santacruceño recibir como ofrenda el Partido Justicialista bonaerense. Sin embargo, el cierre de listas del oficialismo dejó un tendal de enojados en especial a nivel comunal. Algunos intendentes sintieron el rigor de tener que soportar en su distrito las listas colectoras armadas por el kirchnerismo. Varios intendentes y diputados se quejan, en voz baja, por el reparto de lugares.