Sobrevivientes de la Esma complicaron ayer la situación del ex prefecto Héctor Febrés, a quien señalaron como uno de los más cruentos torturadores de ese centro clandestino de detención que funcionó durante la dictadura, en la segunda jornada del juicio oral en su contra por delitos de lesa humanidad.
"Acá en este lugar, yo soy el torturador", se presentó Febrés en la Esma ante el secuestrado Carlos Gregorio Lordkipanidse, uno de los cuatro sobrevivientes por cuyos casos se lo juzga acusado del delito de "torturas".
Tanto Lordkipanidse como el primer testigo del día, Carlos Alberto García, aportaron en largas declaraciones un minucioso detalle del funcionamiento de la Escuela de Mecánica de la Armada en la última dictadura, incluido el "trabajo esclavo" al que eran sometidos para falsear todo tipo de documentos.
Además, los secuestrados eran obligados a trabajar en tareas de impresión del diario Convicción, editado por el dictador Emilio Massera, como parte del proyecto político que pretendía impulsar. Más breves y escuetos, también pasaron por el tribunal los sobrevivientes Alfredo Margari y Josefa Arminda Prada de Olivieri.
"El 'Gordo' Daniel se ponía reloco cuando torturaba tratando de sacar información", refirió García al abrir la segunda jornada del juicio. Lordkipanidse, último testigo del día, señaló a Febrés como el responsable del "sector 4" de la Esma que tenía a su cargo los "cuartos de interrogatorio y la huevera", donde daban a luz las detenidas. (Télam)