La tradicional empresa frutícola familiar del Valle, Moño Azul SA, recibió días atrás una oferta económica por el 100% de su paquete accionario.

Así lo confirmó ayer una alta fuente de la firma, asegurando que "la semana pasada se firmó un acuerdo de confidencialidad con un banco inversor para analizar una propuesta de compra". Pero en forma inmediata, la fuente aclaró: "Moño no está en venta, sólo trasladamos a los accionistas, como corresponde, la propuesta mencionada".

Fuertes comentarios recorrieron esta semana gran parte del Valle por este tema. En Buenos Aires y el exterior también se escucharon algunos comentarios. Nombres de las empresas que potencialmente podrían ser los compradores, valores de venta de Moño Azul, quién se queda y quién se va, qué cantidad de dinero recibirán los accionistas y muchas especies alrededor de la posible operación. Muchos son los intereses que están en juego.

Lo que sí está confirmado es que la empresa que hizo la oferta, a través del banco inversor, es una firma de agroalimentos argentina de capitales externos. En la región tres son las firmas que dan con este perfil: Expofrut SA, Salentein Fruits SA y Dole SA.

Según pudo saber este diario, los accionistas de Moño Azul definirán su posición en los próximos días.

Si la propuesta es finalmente aceptada, comenzarían las negociaciones para trabajar en forma conjunta para determinar las previsiones que corresponden a la operación.

Ambas empresas contratarían estudios de asesores que garantizarían la plena transparencia de la operación.

Ofertas anteriores

Cabe destacar en este sentido que Moño Azul recibió en los últimos 15 años dos propuestas de compra, una a principios de los '90 realizada por un Fondo Común de Inversión y otra a fines de la misma década por un grupo de bancos internacionales. En ambos casos las ofertas fueron rechazadas por los accionistas.

La empresa Moño Azul es una de las firmas frutícolas más importantes del país.

Su producción comprende peras, manzanas, uva de mesa, naranja, limón, durazno, ciruelas y frutas secundarias.

Anualmente comercializa alrededor de 80 millones de kilos de frutas, siendo una gran parte de la misma exportada a destinos de alto poder adquisitivo. Por otra parte, la marca Moño Azul en el mercado interno es la más reconocida por el consumidor.

Datos consignados por la firma destacan que la empresa da trabajo anualmente a más de 1.300 familias por temporada.

Moño Azul posee algo más de 1.200 hectáreas de frutales distribuidas en distintos puntos del país, pero concentrando la mayor parte de ellas en la zona del Valle de Río Negro y Neuquén.

Asimismo tiene dos importantes galpones de empaque, uno de Villa Regina (Río Negro) y otro en Vista Alegre (Neuquén) y cámaras frigoríficas con un capacidad de un millón de cajas por temporada.

Este diario buscó contactarse ayer con autoridades de las potenciales firmas que podrían estar en condiciones de participar de la negociación (Expofrut SA, Salentein Fruits SA y Dole SA), pero en todos los casos negaron estar involucrados en una operación de este tipo.