ROCA.- La Federación de Jubilados ocupó esta mañana la delegación local del PAMI cansados de la falta de atención que sufren originada en pesima situación que atraviesa la institución.
A ello se le suma el hecho de que la Federación de Clínicas de Río Negro esperará hasta mañana alguna respuesta con respecto a una gruesa suma que se le adeuda que, en caso de no concretarse, daría lugar al corte de las prestaciones.
Cansados de no recibir respuestas por parte de la administración central, la Federación tomó durante una hora, entre las 11 y las 12, la delegación roquense para exigir medidas que apunten a mejorar el servicio que recibe el afiliado. La medida fue apoyada por los empleados de la repartición, nucleados en ATE, quienes reconocieron que están saturados y que la falta de personal es "grave, porque no sólo afecta la calidad de la atención, sino que impide auditar y controlar el dinero que el PAMI paga mensualmente a sus prestadores".
Además de la toma pacífica, que se irá incrementando en tiempo conforme no haya una respuesta de la administración nacional, se suspendieron también todas las actividades que la Federación había planificado con la obra social para noviembre.
Por su parte Feclir envió la semana pasada una carta documento a la administración provincial exigiendo el pago de una abultada deuda que, según los profesionales, supera los 6 millones de pesos y tiene origen en prestaciones impagas desde el 2005 en adelante. Según manifestó Roberto Bernardini, titular de la entidad, la obra social todavía no dio ningún tipo de respuesta a la solicitud, aunque se esperaría hasta hoy para definir medidas. Bernardini reconoció que entre las posibilidades que se barajaban se incluyen restricciones a las prestaciones a los afiliados.
Fuente: (AR).