WASHINGTON (Télam).- El presidente estadounidense, George W. Bush, advirtió ayer que el desarrollo de armas nucleares por parte de Irán podría desencadenar una tercera guerra mundial, en tanto que desestimó un conflicto entre Rusia y su país por la crisis en torno al programa atómico iraní.
Los comentarios de Bush llegaron horas después de que el gobierno iraní dijo que el presidente ruso, Vladimir Putin, presentara una nueva propuesta para resolver el diferendo mundial durante su visita de ayer a Irán y su reunión con su par Mahmoud Ahmadinejad, aunque sin especificar en qué consiste la iniciativa.
Además, el principal negociador nuclear iraní, Ali Larijani, reveló también ayer que se reunirá con el jefe de la política exterior de la Unión Europea (UE), Javier Solana, el próximo martes en Roma para buscar una solución al conflicto, que radica en las sospechas de que Irán quiere dotarse de la bomba atómica.
Bush subió el tono de su retórica antiiraní durante una extensa conferencia de prensa en la Casa Blanca en la que advirtió que el mundo debe hacer más para aislar a la república islámica, que niega las acusaciones y afirma que su programa nuclear tiene fines sólo pacíficos de generación de energía.
"Tenemos un líder en Irán que anunció que quiere destruir a Israel", dijo Bush respecto de Ahmadinejad, que en 2005 generó una polémica de dimensiones planetarias al llamar a los musulmanes a "borrar del mapa" al Estado judío. "Por eso le he dicho a la gente que, si están interesados en evitar una tercera guerra mundial, parece que deberíamos estar interesados en impedir que (los iraníes) tengan el conocimiento necesario para fabricar un arma nuclear", señaló Bush, citado por la cadena CNN.
En Teherán, el negociador nuclear Larijani dijo que Putin presentó una nueva propuesta para solucionar la crisis atómica y que Irán se reservaba el derecho de estudiar la iniciativa, aunque no dio otros detalles. El martes, durante una histórica visita a Teherán, el mandatario ruso defendió el derecho de Irán a la energía nuclear con fines pacíficos y advirtió contra lanzar una ofensiva contra la República Islámica, en comentarios que se interpretaron como una alusión a rumores de la posibilidad de un ataque estadounidense. "Estoy ansioso por obtener la lectura de Putin sobre su encuentro" con Ahmadinejad y el líder supremo iraní, ayatollah Ali Khamenei, declaró Bush. "En lo que estoy interesado es en si continúa teniendo o no las mismas preocupaciones que tengo yo", prosiguió Bush. La semana pasada, en otro firme respaldo del líder del Kremlin a Irán, Putin dijo en Francia que Rusia no tenía pruebas de que Teherán quisiera dotarse de la bomba atómica.