Miércoles 17 de Octubre de 2007 Edicion impresa pag. 51 > Cultura y Espectaculos
Antunes, un tribalista solo

BUENOS AIRES (Télam).- El poeta, músico y compositor brasileño Arnaldo Antunes editó en el país su disco "Qualquer" en el que profundiza la línea acústica y que definió como "enfocado en las canciones y con una sonoridad más naturalista".

"Quise privilegiar las canciones y hacer un disco en el que pudiera cantar con el tono más natural de mi voz, con el que hablo, que es más grave", contó Antunes sobre la nueva placa, donde prescinde de la percusión y sólo hay guitarras, piano y bajo."Con una banda más pesada con todo el peso de las guitarras distorsionadas y la batería -explicó- yo siempre elegía tonos más agudos para cantar con más volumen de voz, de un modo más sucio, más rocky".

El artista anunció que "ahora quise enfocarme en otra forma de trabajo, en una interpretación más intimista, más naturalista, con la voz en un lugar más confortable en el que pudiera saborear más las palabras".

Nacido en San Pablo hace 47 años, poeta, artista plástico y videoartista, Antunes ingresa a la escena musical brasileña a comienzos de los 80 liderando la banda de rock Titas. Luego, en los 90 inició una carrera musical solista que alcanzó su punto más alto con la edición de "Tribalistas", disco que realizó junto con Marisa Montes y Carlinhos Brown y que vendió más de un millón de placas. Después, Antunes editó dos discos solistas: el mágico y exquisito "Saiba" y "Qualquer", con los que termina de posicionarse como una de las apariciones más importantes de la música popular brasileña posterior al tropicalismo.

"'Qualquer' fue grabado durante tres días en un estudio con todos los músicos tocando juntos a la manera de un vivo; ensayamos dos meses antes de entrar a grabar y, simplemente, elegimos después las mejores tomas completas de cada canción", contó Antunes. En el disco lo acompañan Cezar Mendes en guitarra, Chico Salem en guitarra acústica, Dadi Carvalho en bajo y guitarra de 12 cuerdas, Daniel Jobim en piano y Edgard Scandurra en guitarra con talkbox y banjo.

Respecto de la herencia del tropicalismo que recibió su generación, Antunes subrayó que el género creado por Caetano Veloso, Gilberto Gil y Tom Zé que unió el pop con los ritmos regionales "es un terreno conquistado desde el que partimos como un a priori".

"La propuesta estética y la conquista del tropicalismo fue hacer una mezcla de distintas informaciones culturales y producir una información cultural original a partir de eso y esto quedó como un terreno conquistado para los que vinimos después", señaló. "Quien está hoy haciendo música en Brasil no está preocupado si está haciendo samba, rock, maracatú, funky, hay absoluta libertad para transitar entre los géneros y hacer mezclas con mucha libertad y esa creo que es la conquista que el tropicalismo le dejó a toda la música popular de mi país".

Respecto de su propio trabajo, remarcó que siempre lo vio "conectado con la tradición popular de la música de mi país y con una afición pop para ser oído por un público masivo. Nunca quise hacer música para pocos, aunque sin ceder en mis ambiciones de lenguajes, en la posibilidad de estar proponiendo cosas, en la búsqueda de alterar la sensibilidad de las personas, que es el mayor placer de todo esto", concluyó.

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