NEUQUÉN (AN).- La Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) salió ayer a pedir la incorporación de 600 auxiliares de servicio y administrativos a la planta del Estado provincial.
Ayer los trabajadores que buscan su cambio de situación laboral comenzaron a retener tareas. La medida de fuerza impactó en los distritos educativos de Zapala, Junín y San Martín de los Andes, Chos Malal, Neuquén y Cutral Co.
La asamblea que realizaron ayer en la sede del Consejo Provincial de Educación decidió continuar con los paros parciales. Los trabajadores le solicitarán por nota una audiencia a la subsecretaria de Educación Mara Álvarez. Quieren que la reunión tenga lugar mañana.
El reclamo busca una extensión del acuerdo alcanzado a principios de año. Se trata de una negociación por la cual el gremio docente ATEN, y los estatales ATE, UPCN junto al Ejecutivo acordaron un traspaso progresivo de este segmento del personal a la provincia. Hasta entonces se desempeñaban como contratados.
Por este proceso, el gobierno terminará emitiendo decretos que incorporarán a unos 1400 empleados. Hasta ahora se desempeñaban como contratados o bajo un subsidio provincial.
La delegada de ATE, Ramona Cabral, afirmó ayer que ahora pugnan porque unos 600 auxiliares y administrativos que no fueron parte del anterior acuerdo, tengan la misma posibilidad.
"A principios de año eran unos 2.000 los empleados que esperaban cambiar de condición. Pero los decretos van a terminar dejando afuera a unos 600 empleados", dijo Cabral.
Añadió que "la intención es que el plan de lucha se siga extendiendo en los próximos días en el resto de la provincia, si es que no tenemos una respuesta satisfactoria".
Mediante esta negociación, el gobierno acordó un mecanismo de incorporaciones al sistema educativo que tuvo en cuenta la cantidad de aspirantes por ciudad y la antigüedad de cada uno en funciones.
Se publicaron los listados, y el personal tuvo la posibilidad de impugnar las listas.
Cabral dijo que parte del reclamo también fue para conseguir que el gobierno disponga una suba en las asignaciones familiares, algo que ATE plantea en toda la Administración Pública.
