El director gerente saliente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Rodrigo Rato, consideró ayer que la Argentina aún necesita de estabilidad para alcanzar una plena normalización de su economía.

"Para alcanzar una normalidad plena se necesita estabilidad", dijo Rato pese a que estimó que la Argentina es un "ejemplo de normalización" por la recuperación económica que logró tras la crisis del 2001.

Las declaraciones se conocieron en días en que el ministro de Economía, Miguel Peirano, prepara su viaje a Washington, Estados Unidos, para participar de la Asamblea Anual del Fondo Monetario Internacional (FMI) y del Banco Mundial (BM), visita que reabrirá el debate por la renegociación de la deuda que la Argentina mantiene con el Club de París.

En una de las últimas conferencias de prensa como jefe del organismo, Rato recordó que, en el FMI, ya han expresado un "juicio positivo" sobre el aumento de los ingresos fiscales en Argentina.

En el encuentro con la prensa, el ex ministro español también se refirió a Argentina, que pretende renegociar deudas por valor de 6.200 millones de dólares con el Club de París, que agrupa a 19 países acreedores.

Hace unos días, un funcionario estadounidense dijo que para Washington bastaría con un "entendimiento político" de la Argentina con el organismo.

"Creo que en los próximos días tendremos la oportunidad de hablar con las autoridades argentinas", dijo Rato. "No daré mi opinión sobre algo que no ha sido propuesto por las autoridades argentinas antes de que lo hagan", puntualizó.

Por su parte, Peirano encabezará una delegación que llegará el jueves a la capital estadounidense y que integrará el secretario de Finanzas, Sergio Chodos, el jefe de Asesores, Javier Alvaredo, y el presidente del Banco Central, Martín Redrado. El núcleo central de la asamblea se desarrollará entre el 19 y el 22 de octubre en la sede del FMI en Washington. El cónclave será el primero que comandará el flamante director del organismo francés, Dominique Strauss Khan. Fuentes del Palacio de Hacienda confirmaron que du

rante el fin de semana se llevará a cabo una reunión privada con Strauss Khan. Decidido a hacerse presente en Washington, Peirano se verá obligado a pronunciarse sobre la renegociación de una deuda de 6.300 millones de dólares con el Club de París y deberá soportar nuevos embates de los acreedores que no entraron al canje y que aún tienen títulos impagos por 20.000 millones de dólares. El gobierno argentino, al igual que el Club de París, manifestó su voluntad de comenzar el diálogo, pero bajo la condición de evitar la supervisión del FMI, algo que figura en los reglamentos de la entidad europea. De allí que será de vital importancia el resultado de las reuniones bilaterales que encarará Peirano.