PEKÍN (AFP/DPA) -La lucha contra el desperdicio de recursos y las desigualdades sociales serán las bases del desarrollo económico chino en los próximos cinco años, según se desprende del inicio del 17º Congreso del Partido Comunista chino.

El número uno del PC chino, Hu Jintao, recalcó en su discurso inaugural del congreso el costo del crecimiento chino en términos humanos y ecológicos.

"El crecimiento nos costó demasiado caro en lo que respecta a los recursos y el medio ambiente", mientras que "el desarrollo sigue siendo desigual entre las zonas urbanas y rurales, entre las diferentes regiones y entre sectores económicos y sociales", dijo.

Hu subrayó la necesidad de medidas en favor del campo, del empleo, de la protección social, de la educación, sin abandonar el rumbo de "la reforma y la apertura hacia el exterior" que sentaron las bases del éxito de la economía china, cuya tasa de crecimiento sobrepasó el 10% en los últimos cuatro años, y que todo indica que volverá a lograrlo en 2007.

Aunque los últimos años han sido sinónimo de crecimiento y normalización económica, también se han visto marcadas por el aumento de la desigualdad. Los desequilibrios entre las zonas rurales y urbanas se están acentuando.

En 2006, el ingreso medio anual para los habitantes de las ciudades (unos 1.130 euros) era 3,28 veces más elevado que el los campesinos, en comparación con 3,22 en 2005.

La reforma democrática

Sobre el reclamo de activistas por los derechos humanos y gobiernos occidentales por una reforma democrática , el PCCh ha pedido de paciencia. La formación señala su compromiso de celebrar elecciones locales, de una mayor apertura del gobierno y de democratizar el partido, al tiempo que pide al pueblo chino que permanezca unido detrás de la "modernización socialista" liderada por el partido y que espere la democracia... por unos 100 años

"La reforma democrática debe tomar en cuenta a 1.300 millones de personas y la situación nacional de China. No se puede ir demasiado rápido, porque en ese caso (la reforma) podría tener consecuencias negativas sobre nuestra sociedad", explica a dpa Yang Fengcheng, erudito marxista de la Universidad del Pueblo en Pekín.

Los medios estatales elogiaron que el jefe de Estado y de partido, Hu Jintao, utilizara la palabra "democracia" en más de 60 ocasiones durante su discurso A pesar de sus promesas de expandir la democracia y la transparencia dentro del partido, Hu no hizo mención alguna a una reforma democrática de gran alcance. La ideología clave del ex líder del partido Deng Xiaoping, consagrada en la constitución del comunismo chino, exige "sostener el liderazgo del partido y mantenerse en la vía socialista, evitando una liberalización burguesa y un giro al capitalismo". Cualquier reforma que acerque la posibilidad de elecciones nacionales multipartidarias requeriría que el PCCh volviera a reformar su constitución Líderes comunistas han sugerido que la fase de "modernización socialista" -y, por lo tanto, la ausencia de una democracia multipartidista- durará al menos 100 años.