SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Los empresarios del turismo estudiantil explicaron el crecimiento del sector y replicaron en duros términos los dichos del consultor mexicano, Cesar Dachary, quien aseguró ante la prensa local que "este producto turístico no es beneficioso para Bariloche". Indicaron que el empresariado dedicado a la prestación de servicios de turismo joven ha dado muestras sobradas en la última década, de una preocupación seria y responsable, respecto al mejoramiento de los servicios prestados, al ordenamiento del mercado, haciendo del mismo una relación sustentable pasajero/entorno.
En particular criticaron las teorías del consultor mexicano en que "no hay que mezclar el turismo estudiantil con el extranjero", en una comparación de Bariloche con Cancún, donde el turismo de buen poder adquisitivo sucumbió ante la desmedida oferta de servicios.
"Sin quitarle mérito a Dachary y su notable currículum en temas turísticos, sus aseveraciones nos parecen desmesuradas en principio, y a toda luces irresponsables, sobre todo por no ir acompañadas de un concienzudo estudio de la realidad de mercado local, especialmente la del último lustro", señalaron.
Los empresarios recordaron que el turismo joven proporciona a Bariloche un caudal de aproximadamente 120.000 turistas al año, la mayoría de colegios argentinos, a diferencia de lo que sucedía en Cancún, donde más del 90 por ciento del turismo provenía de los Estados Unidos.
Señalaron que la creación de circuitos turísticos específicos para los jóvenes, los cambios de horario en el entretenimiento nocturno, las constantes campañas a favor de la protección del medio ambiente, la diversión saludable y la no violencia, desarrolladas en conjunto con la intendencia del Parque Nacional Nahuel Huapi, la secretaría de turismo local y la Asociación Empresaria Hotelero Gastronómica, son sólo algunas de las muestras que este sector del empresariado puede dar a Dachary, para que estudie las posibilidades ciertas de compatibilizar actividades productivas, que dan trabajo y crecimiento a esta zona de la Patagonia Argentina.
"Esta es a todas luces una actividad que Bariloche debe defender", sostuvieron. Indicaron que estudios de mercado realizados por el sector de arrojan algunos números significativos: por ejemplo "el 90 por ciento de los pasajeros que realizan su viaje de egresados retornan en el transcurso de dos años siguientes como turistas individuales. A no ser que conscientemente deseemos deshacernos de 120.000 pasajeros/año, de 960.000 noches cama, de alrededor de 2.000.000 de servicios gastronómicos y de aquellos que en razón del efecto cascada se suman año tras año en carácter de turistas individuales, que conocieron por primera vez este destino a partir de su viaje de egresados, y que en razón de la atención que recibieron lo vuelven a elegir".
Este año la secretaría de Turismo de la Nación reglamentó la forma en que se deben comercializar los viajes de egresados, que incluyen un seguro sobre los servicios básicos, de manera que ninguna empresa pueda vender los paquetes y luego no brindar el servicio. El turismo estudiantil opera entre los meses de junio y enero de cada año, durante ocho meses, y da trabajo a centenares de residentes. Se estima que más del 80 por ciento del valor de un viaje de egresados corresponde a servicios que se brindan en esta ciudad.