Viernes 05 de Octubre de 2007 Edicion impresa pag. 36 > Sociedad
La prostitución, un negocio que crece sin regulación
Hoy en Sierra Grande trabajan unas 30 mujeres. Padecen una situación de extrema vulnerabilidad.

SIERRA GRANDE (ASG).- El negocio de la prostitución en Sierra Grande proliferó significativamente desde que abrió la empresa de origen chino que reactivó el complejo minero, hace casi dos años. Pero ello no fue acompañado por una ordenanza que regule la actividad en la ciudad y los controles municipales son insuficientes, admiten todos. Ante esto, la situación de vulnerabilidad de las trabajadoras sexuales es muy grande.

Algunos cabarets abrieron y cerraron en poco tiempo. Otros, por el contrario, soportaron la crisis y hoy funcionan en la localidad cinco locales, denominados whiskerías, perfectamente visibles por las luces rojas que desde el frente llaman la atención de clientes locales y foráneos. En cada local trabajan en promedio 6 chicas. En la actualidad hay unas 30 mujeres que se dedican a la actividad, aunque este número varía notablemente de acuerdo a la presencia de empresas.

Por ejemplo, cuando se realizó la obra del tendido eléctrico en la ciudad llegó a haber cerca de 90 mujeres trabajando; cuando se hizo el gasoducto, unas 60. Ante esta situación, no hay ordenanzas municipales adecuadas frente a la oferta nocturna y los controles de rutina no alcanzan, porque son sólo comerciales y no van más allá de la detección de lo que podrían ser prostíbulos clandestinos que funcionarían en el fondo de esos mismos locales.

La joven paraguaya de 22 años que ayer denunció una crítica situación de la prostitución en Sierra Grande, desnudó al mismo tiempo cómo funciona el negocio de las whiskerías en la región y el extremo al que se puede llegar en el mundo de la noche, afectando hasta la salud.

"A nadie se le ocurre cobrar 15.000 pesos, ni los dueños sacan esa plata", dijo ayer el administrador de una whis

kería a este medio. Hacía referencia a una declaración de la joven en la que aseguraba que había llegado a la región desde su país con la expectativa de cobrar esa cifra mensual por su trabajo. Por otra parte, desde el hospital local, el director Hernán Cáceres dijo que derivaron a la joven a Viedma.

La prostitución es un negocio que creció mucho en poco tiempo pero que ahora se mantiene estable. Ante la proliferación de locales en los últimos años, y el notorio crecimiento de la oferta y demanda de sexo, el año pasado un grupo de alternadoras pidió al Concejo Municipal la creación de una zona roja en la ciudad.

En realidad, lo que pedían era blanquear el lugar donde las chicas ejercen en la actualidad la prostitución, frente a la Ruta Nacional 3 . El edil Ramón Fortete se había hecho parte del reclamo, pero no alcanzó ni siquiera a presentar el proyecto de ordenanza. Es que las partes involucradas, entre ellos comerciantes que están frente a la vía nacional, se opusieron rotundamente.

 

Las libretas sanitarias

 

Uno de los aspectos que sí se respeta cuando Inspección Municipal hace los controles en las whiskerías es la Libreta Sanitaria, que es estrictamente obligatoria. Los formularios de examen los entrega la municipalidad, pero deben ser confeccionadas por un médico de Salud Pública, según explicó el director del hospital local, Hernán Cáceres. Para las chicas que trabajan en los cabarets, los exámenes deben ser mensuales, sin perjuicio de disminuir dichos períodos cuando se lo considere necesario. Las ordenanzas exigen examen clínico general, análisis de laboratorio, reacciones biológicas, exámenes radiológicos, de acuerdo a los resultados del examen clínico e inmunizaciones.

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