NEUQUEN (AN).- Un hornero de 37 años falleció en la noche del miércoles en Plottier tras perder el control del tractor en el que circulaba y caer a un desagüe.
El cuerpo fue localizado ayer por la mañana tras una intensa búsqueda emprendida por familiares y agentes policiales tras la denuncia que realizó su esposa por la desaparición cerca de la medianoche.
El trágico accidente sucedió en la calle Jorge Newbery, casi avenida San Martín, del sector Los Hornos de Plottier. La zona es el fuelle entre la meseta y el área de chacras y se caracteriza por la presencia de hornos de ladrillos. Precisamente uno de los establecimientos arcilleros era propiedad del obrero fallecido, identificado por la Policía provincial como Félix Mamaní, de 37 años.
El hombre era buscado desde las 23 del miércoles por familiares y agentes policiales tras que su esposa denunciara a la Comisaría Séptima de Plottier su desaparición. Pese a los esfuerzos en la búsqueda, que se vio limitada por la inexistencia de alumbrado público en el sector, el cuerpo de Mamaní recién fue hallado por personal policial a las 6 de la mañana de ayer, a tan sólo trescientos metros de su vivienda.
Según informó el Jefe de la Policía provincial, Roldando Figueroa, "Mamaní concurrió a un asado, en el que habría comido y bebido, y de donde partió con destino a su casa, a la que no llegó". El jefe policial indicó que el cuerpo de Mamaní sería sometido en la noche de ayer a una autopsia para determinar a ciencia cierta las causales de su muerte y los niveles de alcohol registrados en su sangre. No obstante, Figueroa precisó que "hay rastros en la calle de que el tractor zigzagueó y cayó al desagüe de importante tamaño, quedando Mamaní aprisionado por el rodado bajo el agua". Allegados al hornero avalaron ayer la teoría al indicar que el tractor marca Deuz que Mamaní conducía no contaba con luces ya que registraba una falla de baterías, situación que habría favorecido el incidente dada la baja visibilidad de la calle.
El trágico accidente conmocionó ayer a los vecinos de la zona. Es que, si bien Mamaní era oriundo de Bolivia, residía en Plottier desde hace muchos años, tenía cuatro hijos menores de doce años, y era reconocido por sus vecinos y empleados como un hombre muy trabajador.
Precisamente, una de las hipótesis que ayer manejaban los allegados a Mamaní es que tras el asado el hombre se dirigió a realizar tareas con el tractor. Según se indicó el rodado era utilizado para mover el fango arcilloso con el que se preparan los ladrillos antes de su cocción, trabajo que Mamaní solía prestar a otros hornos de la zona.
Este accidente, un tanto usual entre los chacareros, no es el primero en conmover a los moradores de la zona. Pocos meses atrás otro vecino falleció en inmediaciones de la calle Carlos Pellegrini, al perder el control de su tractor y caer, en ese caso, a un canal de riego.
