NEUQUEN (AN).- "Un soldado argentino miserable y muerto de frío bebe de un mate de coco mientras se protege en las dunas de York", se lee la traducción del epígrafe de una fotografía que un soldado británico tomó durante la guerra de Malvinas.
La descripción es fría, precisa, contundente, aunque el "colimba" argentino tiene en la mano un mate calabaza y está prendido a una bombilla doblada.
El rostro de ese pibe de los '80 lo revela extrañado, ajeno, indefenso ante la cámara del enemigo y muestra la desnude y la precariedad con la que el Ejército Argentino enfrentó a Gran Bretaña tras la invasión.
Desde ayer a la tarde y hasta el próximo martes, la remozada sala Conrado Villegas de Neuquén exhibirá la muestra fotográfica "Cruces", imágenes distintas a las muchas que ya se han visto.
Es que muchas se ellas, se las sacaron los soldados argentinos a su compañeros, otras las tomó el enemigo y alguna fue robada por un isleño que sumó información para la inteligencia británica.
Hay fosas de bolsas negras, el cadáver de un soldadito congelado en el pozo de zorro y varias de chicos que fueron llevados a una guerra y que posan ingenuos acosados por la necesidad y el desamparo. De 10 a 12 y de 19 a 22, los días semana y de 19 a 22 el domingo.
Cada una de las fotografías está acompañada de un texto explicativo que vale la pena analizar.