CIPOLLETTI (AC).- "La fuente de información siempre es la misma: la víctima. La objetividad de esa fuente de información está puesta en tela de juicio en este debate", dijo Gustavo Palmieri.
Si bien faltan declarar varios testigos aún, el abogado expresó que hasta ahora su opinión es que "con la poca prueba que se encuentra, la subjetividad en los testimonios es muy alta. Y si la subjetividad es muy alta, la credibilidad de los testigos es muy baja".
Palmieri opinó que un relato para ser verosímil y creíble debe reunir ciertas condiciones, que en este caso "no se dan".
"Todo lo que viene luego, me parece que justifica la escasa credibilidad de ese testimonio. La necesidad de avanzar en campañas mediáticas tan informatizadas, dando cuenta de hechos que parecería que son por sí mismos ciertos y la posibilidad de confirmación son muy bajas, a nosotros nos da la impresión que adecuadamente refutada esta hipótesis es tan creíble la versión que da el imputado acerca de que él no tiene nada que ver en este hecho como la versión que da la joven acerca de que sí sucedió. Y en ese marco lamentablemente hay un estado insuperable de duda que me parece que por el momento la acusación no puede destruir".
Carlos Anzaldo todavía no declaró en el juicio, pero lo hará antes de que termine el debate, reiteró ayer Palmieri. "Estamos aguardando el momento oportuno", aseguró.
La querella, consideró "bastante satisfactoria" la audiencia de ayer, en la que también declaró la directora del CEM 72; una mujer que había sido paciente de Anzaldo hace 20 años y que relató "un hecho de exhibiciones obscenas"; y otra testigo de la defensa.