RANGUN (DPA) - El líder de la junta militar que gobierna Myanmar (antigua Birmania), Than Shwe, se declaró dispuesto mantener conversaciones de crisis con el enviado especial de las Naciones Unidas al país, Ibrahim Gambari, en un encuentro que tendrá lugar mañana martes, informó ayer la televisión británica BBC.

Gambari se desplazó el sábado pasado a Naypyidaw, sede del gobierno, ubicada a unos 350 kilómetros al norte de la antigua capital, Rangún, y no pudo dialogar con el militar. Gambari busca una salida a la crisis que vive el país, tras la dura represión que ordenó recientemente la junta contra manifestantes que protestaban por la precipitada subida de los combustibles. Aunque no hay cifras claras, se habla de decenas de muertos y numerosos detenidos.

Mientras tanto, el Ejército siguió hoy estrechando su cerco de seguridad en Rangún. Varios estudiantes fueron detenidos durante la tarde mientras protestaban en al menos dos barrios de Rangún, informó la emisora opositora La Voz Democrática de Birmania, con sede en Oslo. Anteriormente se había informado de falta de protestas, en medio de una fuerte presencia de las fuerzas de seguridad en las calles de la antigua capital.