La inminente remoción de la directora de Indices de Precios de Consumo del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), Beatriz Paglieri, fue tomada ayer con optimismo por gremialistas y técnicos del organismo, aunque también con desconfianza por políticos de la oposición, que señalan como principal responsable de las manipulaciones estadísticas al secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno.

La partida de Paglieri es una muestra más de la interna que se desató en el gobierno con la llegada de Miguel Peirano al ministerio de Economía y su enfrentamiento con Moreno. De entrada el actual encargado del palacio de Hacienda dejó entrever que Paglieri no contaba con su visto bueno. La funcionaria fue puesta por el secretario de Comercio Interior, en el medio de las denuncias de manipulación de los indicadores para complacer las preocupaciones del gobierno en un tema ultra sensible: el aumento de la inflación.

Ayer, el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, afirmó que la crisis en el INDEC "va en camino de solucionarse" y remarcó que la decisión que tome la comisión de diálogo sobre la situación de ese organismo "tendrá una gran legitimidad", en referencia a las versiones sobre un eventual desplazamiento de Paglieri, quien viene siendo cuestionada desde su designación en enero, cuando comenzó la manipulación del IPC.

Tomada admitió que no conocía "los detalles" al respecto, al igual que la ex directora de la Encuesta Permanente de Hogares del INDEC, Cynthia Pok, quien participa de la Comisión pero "en carácter estrictamente técnico".

No obstante, Pok sostuvo que la ida de Paglieri "sería una excelente noticia", ya que "todo el personal del INDEC está denunciando desde principios de año esta situación de intervención sobre las estadísticas que se ha profundizado en este período de manera escandalosa".

En el mismo sentido se expresó el delegado de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) en el INDEC, Daniel Fazio, quien calificó a Paglieri como "el cimiento sobre el cual se ha construido una cuestión distorsiva" en el organismo. Sin embargo, remarcó que no se trata "sólo de una cuestión de nombres", sino de "tener metodologías transparentes hacia la sociedad".

Por otra parte, Alejandro Rodríguez, vocero del candidato presidencial Roberto Lavagna, calificó como "una operación de puro maquillaje electoralista" a la posible remoción de la funcionaria. "Como no pueden parar la inflación, ahora quieren distraer haciendo un poquito de marketing. Sacarla a Paglieri es una operación de puro maquillaje electoralista, pero nadie se atreve a tocar a Guillermo Moreno, porque lo sostiene la Casa Rosada", sostuvo Rodríguez.