Lanús entendió cómo se juega este tipo de competencia, y que vencer de local es más que vital para mantenerse con vida. Por eso, ayer en el Sur, derrotó por 2 a 0 al Vasco da Gama y ahora viajará tranquilo a Brasil.

Pero, ¿se fue conforme Ramón Cabrero del estadio "Granate? Más o menos, porque en realidad su equipo pudo sacar mayor diferencia, pero el arquero Silvio Luiz le atajó un penal a José Sand.

Aunque tardó unos minutos en acomodarse, el conjunto argentino fue superior a los brasileños. El cuarteto de volantes marcó la diferencia y con Diego Valeri como abanderado, las situaciones de gol estaban al caer.

Y después de la media hora llegó el festejo en el Sur bonaerense. Agustín Pelletieri, un 5 que la emboca seguido, puso justicia en el marcador y dejo casi nocaut al rival.

Cinco más tarde, una chance inmejorable para el dueño de casa. Tuvo un penal, pero Luiz le tapó a José Sand, que le agregó otro dato a una semana "furiosa" luego de la pelea con los hinchas de River, en el Monumental.

Vasco recuperó una vida con la falla de Sand y la sacó barata, rumbo a los vestuarios.

A la vuelta, la visita mejoró y al menos se aproximó al área rival. Sin embargo, sus delanteros no pesaron y fueron bien controlados por los "granates".

Luego de un bajón, Lanús recuperó la memoria y a partir de los 20 volvió plantarse en campo contrario. Valeri tuvo más participación en el juego y otra vez fue la llave para estirar diferencias.

Lanús comenzó a tener más peso en ofensiva y su hinchada presionaba por otro tanto, sabiendo que la mínima diferencia era demasiado peligrosa de cara a la vuelta. ¿Quién le dio la ansiada tranquilidad? Nada menos que el correntino Sand, que así consiguió tomarse revancha...Y seguir siendo protagonista.