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EE. UU. investigará a empresa de seguridad por la muerte de 8 iraquíes | ||
BAGDAD (AFP) - El gobierno iraquí anuló el permiso de actividad de la empresa de seguridad privada estadounidense Blackwater, encargada entre otras tareas de la protección de la embajada de Estados Unidos en Bagdad, tras un incidente que costó la vida a por lo menos ocho iraquíes el domingo. Blackwater emplea a una gran cantidad de guardaespaldas en Irak y ha protegido, desde la invasión estadounidense en marzo de 2003, al administrador Paul Bremer, a los embajadores John Nogroponte, Zalmay Khalilzad y actualmente a Ryan Crocker. "El ministro del Interior ordenó la anulación del permiso de Blackwater y la sociedad ya no puede trabajar en Irak. Una investigación criminal fue abierta contra los que cometieron crímenes" el domingo, declaró a la AFP el portavoz del ministerio, Abdel Karim Khalaf. "El primer ministro Nuri al Maliki condena y denuncia enérgicamente la operación criminal perpetrada por una de las compañías de seguridad extranjeras en la Plaza Al Nissur", señaló un comunicado del jefe del gobierno iraquí citado por la televisión estatal. Un convoy estadounidense fue atacado el domingo mientras pasaba frente a la Plaza Al Nissur, en el barrio Al Yarmuj, en el oeste de Bagdad, indicaron responsables de seguridad iraquíes. Los contratistas de seguridad privados que acompañaban al convoy respondieron a los disparos. Un funcionario de la embajada norteamericana confirmó que vehículos del "Departamento de Estado estuvieron involucrados en este tiroteo". De acuerdo con los responsables de seguridad, nueve personas murieron y 15 sufrieron heridas. Khalaf confirmó ocho muertos, incluyendo a un policía, y 13 heridos. Muchos de los muertos y heridos eran peatones, indicaron los responsables. La secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, debía "expresar su pesar" al primer ministro iraquí y asegurarle que Washington está "investigando este acontecimiento", afirmó ayer su portavoz Sean McCormack. La embajada estadounidense "se toma muy en serio el problema", declaró por su parte una portavoz de la embajada, Mirembe Nantongo. "Proseguimos las conversaciones con nuestros socios iraquíes", aseguró. "Nadie fue todavía expulsado del país", se limitó a afirmar otro portavoz, W. Johann Schmonsees. No fue posible ayer obtener declaraciones de representantes de Blackwater. | ||
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